Revista Cocina

I’m Natural Don’t Panic 2016

Por Bodegaateneo

No te asustes amigo lector, no me he pasado al lado oscuro de tratar de traducirme a otro idioma, es mas, cuando escribo esta entrada no tengo claro siquiera que este sea el nombre del vino, o su añada, pero es lo que la etiqueta pone. Debajo de tan directo nombre aparece la pequeña bodega familiar Bodega Coruña del Conde , un municipio lindero por el este con la D.O. Ribera del Duero , pero fuera de la misma, lo cual no impide que haya hasta tres bodegas en este pequeño municipio de un centenar de habitantes , y que elaboradores de otras zonas cercanas, buscan allí las viñas viejas con las que elaborar sus productos.

Tras Bodegas Coruña del Conde se esconde una curiosa historia, ya que al frente de la misma se encuentra Julien Ben Hamou López , nieto del fundador de la bodega , Alberto López Calvo , cuyo nombre apareció durante mucho tiempo en las botellas de la bodega. Alberto López emigró a Burdeos desde su terruño natal en los años 50, y allí aprendió lo necesario para elaborar buenos vinos, poniéndose a la faena tras su jubilación, y fruto de ello esta bodega . Tras la muerte de su abuelo, Julien sintió la necesidad vital de recuperar la bodega y el legado de su abuelo, y volvió desde la gran ciudad al pequeño pueblo castellano. En la actualidad , cuenta con una veintena de parcelas con viñas centenarias , las más jóvenes de 40 años , manejando alrededor de 6,5 hectareas, a una altura rozando los 1000 m , y elaborando su propio vino con una producción de 25000 botellas , siendo uno de sus frutos este vino natural que  hoy os traigo.

I’m Natural Don’t Panic 2016

Abuelo y nieto . Foto extraida del Diario de Burgos

El I’m Natural Don’t Panic 2016 es un tempranillo con un aporte adicional de albillo mayor, embotellado en septiembre de 2017 y que reza en la etiqueta “contiene sulfitos naturales” . Presenta un color rojo picota de capa alta, ribete afresado, con una lagrima densa y persistente que tinta la copa, para un volumen del 14%. Se muestra tímido en nariz, fruta roja y negra compotada, alguna nota especiada como dándole ese punto rústico, intensidad baja, nada artificiosa y muy sincera. Buena entrada, carnoso, fruta negra madura, punto glicérico bastante marcado, taninos potentes pero nada molestos, cuerpo medio, fácil de beber, con una discreta persistencia, y un regusto final amargo, con notas de cacao tostado, aunque no tiene paso alguno por barrica.

Hace honor a su nombre, es un vino natural que se deja beber muy bien y que me dejó muchas muchas preguntas. Nunca había probado un vino natural con uva tempranillo, menos ribereña, y por fin podía probar, o mejor comparar, un vino natural de un vino no natural (?) .

La gran pregunta, descontando lo obvio al ser una tempranillo de altura, es si realmente la tempranillo de la zona, sin mas aditivos, es así,  ¿cuánto se añade a un vino no natural, para que la tempranillo no sea tan reconocible ? sin olvidar que al no tener paso por barrica, es un vino joven bastante longevo . La duda aún me dura hoy. Este vino provocó un terremoto en mis creencias, y por tanto, decidí desecharlas con prontitud, ya que llegó como una especie de serendipia a mis manos. La respuesta solo me la dará , como siempre , el tiempo. Eso si, enhorabuena si tu primer vino natural es este, ya que si te pasa como a mi, que los primeros que probé no me agradaron demasiado, puede que no te atrevieses a este viaje. Muy interesante.

R.


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas