La simbiosis
Introducción a la
simbiosis
Simbiosis mutualista
Simbiosis
comensalista
Simbiosis parasítica
Simbiosis
amensalista y sinecrótica
Introducción a la simbiosis
A
diferencia de la competencia, o la depredación, la simbiosis no plantea un
conflicto entre los seres vivos necesariamente, aunque en ocasiones si lo hace.
La simbiosis se define como una relación íntima entre dos especies A y B en las
cuales las dos especies viven juntas.
Por
lo general una especie A es más pequeña que la especie B, y la relación puede
ser externa y se la denomina ectosimbiosis, pero si la simbiosis es interna, es
decir la especie A vive dentro de la especie B se la denomina una
endosimbiosis.
Las
endosimbiosis más extremas son aquellas en las que una célula vive dentro de
otra célula “endosimbiosis intracelular, o simplemente endosimbiosis”.
La
relación íntima debe ser prolongada en el tiempo, por lo menos en lo que hace
referencia al ciclo de vida de la especie mas grande, pudiendo ser la mayoría del tiempo o
toda su vida.
Sin
embargo el detalle anterior es problemático, pues algunos casos de simbiosis no
convencionales se pueden confundir con competencia.
En
cualquier caso se distinguen 2 variedades de simbiosis, las que son
persistentes y las que no son persistentes. Las simbiosis persistentes son las
categorías clásicas, mutualismo, comensalismo y parasitismo; mientras que las
simbiosis no persistentes son el amensalismo y la sinecrótica, incluso en esta
categoría podría caber el parasitoidismo.
Ejemplos
de simbiosis se dan en cualquier linaje de ser vivo, e inclusive entre
dominios.
Las
relaciones simbióticas pueden ser obligadas u opcionales. Una simbiosis
obligada implica que las especies A y B no pueden vivir de manera independiente
una sin la otra. Una simbiosis opcional es cuando ambas especies viven
independientemente aunque esto aplica específicamente para el mutualismo y el
comensalismo.
PRINCIPAL
REGRESAR