No todos los mochis son blandos y con relleno dulce.
Y es que también podemos encontrar el kirimochi, una de las múltiples formas de este exquisito fruto de la gastronomía japonesa.
En crudo es duro y para disfrutarlo hay que tostarlo primero en una parrilla, en horno o microondas o incluso en ocasiones hervirlo.
Se puede acompañar con anko (crema de judía roja azucarada) y nata o envolverlo en un alga nori y mojarlo en salsa de soja, de este ultima forma se le conoce como Isobe Yaki-Mochi. Me encanta!
En la sección de recetas de JaponShop.com podéis encontrar la receta detallada
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