Planta de bioetanol ISOLUX
Entre uno de los compromisos con la sostenibilidad, la eficiencia energética y el medio ambiente, la empresa española Isolux Corsán apuesta por el desarrollo de las energías renovables en América Latina, apostando entre otros por proyectos fotovoltaicos como el Parque eólico en Trelew (Argentina) y siendo unos de sus principales mercados objetivo para el desarrollo y su expansión en Latinoamérica.
Además, Isolux Corsán también apuesta por los biocombustibles como otra fuente de energía renovable desarrollando proyectos de construcción de plantas de producción, como el complejo industrial en Meta en Colombia, proyecto realizado para la compañía local Bioenergy cuyo importe asciende a unos 140 millones de dólares. Este complejo industrial que se encuentra en fase de construcción en el departamento de Meta, entre los municipios de Puerto López y Puerto Gaitán, en una zona tradicionalmente ganadera del país, que ahora se está reconvirtiendo en agrícola con el cultivo de distintas variedades, entre ellas la caña de azúcar. En este complejo se incluye una planta de bioetanol con capacidad de 2.100.000 T/caña/año, complementada por una planta de cogeneración eléctrica de 50 MW a partir del bagazo o residuo de la caña de azúcar y otras instalaciones destinadas a la molienda, destilación y producción de vinazas utilizando la misma materia prima.
Además, en Argentina cuenta con una cartera de negocio de más de 1.000 MW, entre los que se encuentra los proyectos de las centrales de ciclo abierto de Ensenada Barragán y Santa Fe, además de la central de ciclo combinado de Loma de La Lata. En este país, la compañía construye la central de generación eléctrica más austral del mundo, en Río Turbio, con tecnología de lecho fluido para carbón, que ha sido diseñada con el máximo respeto por el medio ambiente.
En México, Isolux Corsán ha construido la planta térmica de Rosarito, de 274 MW, en funcionamiento desde 2009.
Y tras obtener financiamiento mediante la aprobación de un préstamo por unos 100 millones de dólares mediante el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para ayudar al financiamiento de proyectos de energía renovable e infraestructura de energía en la América Latina, durante una duración de 7 años incluyendo un periodo de gracia de 2 años, la compañía española podrá respaldará la instalación de las nuevas plantas de generación de energía solar de Majes y Repartición en el Perú, con un total de 40MW de capacidad instalada. Esto supondrá además de la diversificación de la matriz de energía del Perú, una reducción anualmente de 40.000 toneladas de emisiones de C02 y crearán unos 260 puestos de trabajo durante su construcción.
Previéndose que el préstamo también sustente la construcción de la nueva línea transmisión Taubate-Nova Iguaçu, de 500kV, que se tenderá entre los estados de São Paulo y Rio de Janeiro, en una región que necesita un significativo refuerzo de su red básica de transmisión. Que dará origen a unos 1.400 puestos de trabajos donde el 80% serán cubiertos por personal provenientes de las comunidades vecinas.
Fuente: Banco Internacional de Desarrollo y Isolux Corsán
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