Joy

Año: 2015.
Dirección: David O. Russell.
Intérpretes: Jennifer Lawrence, Robert De Niro, Bradley Cooper, Isabella Rossellini, Diane Ladd, Édgar Ramírez, Virginia Madsen.
SinopsisBio-pic centrado en la historia de tenacidad, lucha y superación de Joy Mangano (personaje interpretado por Jennifer Lawrence).
La película narra cómo esta humilde trabajadora lucha y se llega a convertir en una gran vendedora de teletienda, dando a conocer (y vendiendo) productos para el hogar que ella misma inventa.
OpiniónHace ya unos cuantos días, nuestros amigos de Sensacine nos invitaron a ver una pase previo al estreno de la última cinta de uno de los directores que aglutina más éxitos en los últimos tiempos, David O. Russell, quien ha dado forma a The Fighter, American Hustle o Silver Linnings Playbook.  Así que, una vez más, muchas gracias por la invitación, amigos!
Expresado nuestro agradecimiento, pasemos a dejarles nuestra opinión sobre este fiasco. Sí señores, fiasco. Lo único que podemos salvar de la película es la interpretación de su protagonista, la cual le está sirviendo para acumular ya algunas premios...y algunos que quizá vendrán también en un futuro muy cercano...
Se trata de un producto cinematográficamente menor dentro de la filmografía de David O. Russell. Se encuentra lejos, muy lejos de otros trabajos anteriores del director americano.
Si bien la carta que nos ofrece el "maître" tiene muy buena pinta y nos suscita interés, el menú, una vez servido y degustado, te deja con hambre y con cierto mal gusto. El director se acompaña de varios de sus asiduos últimamente, como son Cooper, Lawrence y DeNiro, que como reclamo no están nada mal, pero son sólo humo que enmascaran el vacío que la película en sí misma es. No podemos decir que desagrade, ni que irrite, sin embargo poca justificación le encontramos a este producto irregular, sin profundidad alguna y escaso de elementos que te enganchen o te ayuden a participar en la historia. Historia de superación, sí, pero llevada a la pantalla de una forma muy liviana.
En esa misma línea, de flojera  y cansina candidez, el personaje y la interpretación de Bradley Cooper no se alcanza a comprender; floja, insípida y adolescentemente sin criterio. Si a eso le sumamos, que el anteriormente idolatrado por este espacio, Robert De Niro, sigue naufragando y proporciona aquí otro alarde pobre interpretación, nada hay que destacar de la cinta, más allá del correcto (que tampoco excelso a nuestro juicio) trabajo de Jennifer Lawrence.
Sin más, concluimos que este "culebrón medianamente digerible" se puede dejar para una sobremesa de siesta y semi-sueño. Y si nos apuran, déjenla pasar...
Nota general: 3,0 sobre 10.
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