Revista Opinión
Cuando este mediodía he leído la columna de Juanjo Millás en el dominical de EL PAÍS he comprendido inmediatamente que nadie, nunca, ha podido ni podrá sintetizar lo que es y lo que representa el Partido Popular, el gobernante partido del franquismo postmoderno español, con la maestría y verdad conque lo ha hecho Millás hoy.
Lean y disfruten el texto y las ideas que contiene. Y luego indígnense, al pensar que aunque parezca increíble hay diez millones de ciudadanos españoles tan absolutamente alienados o desesperados como para votar una basura semejante sin ser empresarios, especuladores, banqueros, rentistas o políticos corruptos:
EL PAIS 29 de enero de 2012
El eterno retorno
Juan José Millás
Hay, en todos los internados de curas, un día en el que el prefecto de disciplina recorre furibundo los pasillos seguido de cuatro subalternos en busca de un chivo expiatorio sobre el que descargar todos los pecados del universo, incluidos los suyos. Ese día tiemblan los alumnos, tiritan los pupitres, desaparecen, aterradas, las moscas. Una atmósfera semejante debió de instalarse en la sala de prensa de La Moncloa cuando, tras el primer consejo de ministros de la era Rajoy, apareció Soraya Sáenz de Santamaría, seguida de cuatro de los suyos, con expresión de os la habéis cargado. Os la habéis cargado por las mentiras que os hemos dicho, por las torpezas de cálculo que hemos cometido, por las mezquindades y patrañas que nos habéis obligado a perpetrar para conquistar el poder. Y si yo no os acojono bastante, fijaros en las jetas de estos tres. No se pierdan, en efecto, la mirada de policía de Fátima Báñez; la expresión calibradora de Montoro (¿los fusilamos o los ahorcamos?); el gesto de indiferencia absoluta frente al dolor ajeno del ex-Lehman Brothers Luis de Guindos. Os la habéis cargado por creeros todo, gilipollas. ¿No os dais cuenta, por ejemplo, de que si a un déficit del 6% le correspondía una rebaja fiscal de equis, a uno del 8% le correspondería una disminución de equis más 2? Cuanto mayor fuera la crisis, como juraba y perjuraba Montoro, más deberían bajarse los impuestos a fin de estimular el consumo y todo eso. Total, que al acabar la rueda de prensa se nos quedó la cara de culpable de la víctima sexual frente al cura manoseador. El eterno retorno.