Julio Cortazar, militante de la palabra

"¿Hasta cuándo vamos a seguir creyendo que la felicidad no es más que uno de los juegos de la ilusión?"
"Si la personalidad humana no adquiere toda su fuerza, toda su potencia, entre las cuales lo lúdico y lo erótico son pulsiones fundamentales, ninguna revolución va a cumplir su camino".
Un día como hoy, pero en 1984, fallecía nuestro enormísimo cronopio Julio Cortazar. Cortazar aparte de ser un grandioso escritor donde lo fantástico se colaban en sus relatos de forma inesperada, era un militante de la palabra, seguidor del compromiso del escritor que propuso Sartre allá por los cuarenta. Cortazar, amante de la libertad, enemigo de los apropiadores de la cultura. Cortazar, aquel que lo había sorprendido el peronismo con sus miles de cabecitas que tomaban a grito pampa, descamisado,
tomaban la Casa
que lo había atormentado la presencia del subsuelo de la Patria sublevada
con sus rostros color tierra
pero que a la distancia aprendió a querer, y supo con dignidad, rectificarse, asumiendo su prejuicio burgués de indignarse de la Marcha peronista que tronaban desde los parlantes de la Plaza...
Era Julio el del pucho, onda Humphrey Bogardt, el de la foto oficial tomada por Sara Facio
pero tambien era Julio el de la barba subversiva que abrazaba Cuba y Nicaragua
también era Julio el que lloró desconsolado ante la muerte del Che y el que le dedicó los mas sencillos y bellos versos...
Julio era Oliveira, tanto como nosotros... los que seguimos buscando a La Maga.... tanto los que estamos del lado de aca o de allá
Julio era Lucas y sus pudores,
también era el Libro de Manuel, el de la causa latinoamericana
el que apoyó la primavera camporista y que luego no pudo volver a estos pagos por la amenaza de la AAA...
Julio es nuestro hermano prodigio, con una sensibilidad inigualable
el que denunciaba con Fantomás a las multinacionales,
y también era el que estaba en el Tribunal Russell denunciando la violación de los DDHH...
Julio era el que tendría que haber estado al frente del Nunca Mas
pero que el alfonsinismo le bajó el purgar por ser muy zurdo
porque no adhería a la teoría de los dos demonios
ni se habia sentado a tomar el te con Videla
como lo habia hecho Ernesto Sabato
Julio era puro, ingenuo y rebelde
lungo y desgarbado
con ese porte ciencia ficción que sabía llevar,
que se perdía en las selvas de centroamerica de la mano de su amor
y también supo morir por ella,
así como si nada
Plaf
y se acabó