Título original: House of Many Ways
Saga: El castillo ambulante, El castillo en el aire, La casa de los mil pasillos
Rama: fantástica
Ficha de autora
Edición: Nocturna, 2010
La jovencita Charmaine Baker es una chica de familia acomodada que vive en el reino de High Norland y cuyo único sueño es trabajar en la biblioteca de la Casa Real. Con tal fin escribe una carta al monarca ofreciéndole sus servicios como bibliotecaria, pero pronto sus esperanzas se verán frustradas debido a que la tía Sempronia acaba por buscarle un trabajo cuidando la casa de su tío abuelo, el mago William. Allí conocerá al joven aprendiz de mago Peter y a la perrita mágica Waif, junto a los que descubrirá los múltiples secretos que encierra la casa del tío abuelo William. Los problemas surgirán a raíz del fuerte carácter de Charmain, una niña consentida y poco acostumbrada a lidiar con grandes faenas. Si a esto añadimos su nula capacidad para la magia, tenemos como resultado una aventura caótica en la que Charmain tendrá que ir aplacando su genio para afrontar la importante misión que tiene por delante.
Tras El castillo ambulante y El castillo en el aire, Diana Wynne Jones vuelve a ese loco mundo de casas mágicas y poderosos hechiceros con una aventura que puede leerse de manera independiente de las otras, aunque los guiños a los dos primeros libros son evidentes. En este caso el protagonismo absoluto de la novela recae en la joven Charmaine, una chica algo antipática pero que nos hará reír más de una vez con sus ocurrencias. Para tratarse de un libro tan corto es sorprendente la cantidad de personajes secundarios que aparecen en la historia, bastante bien aprovechados y con un carisma indudable; y además, los que hayan leído la primera novela disfrutarán con la aparición estelar de sus protagonistas, que hacen un pequeño cameo bastante divertido. A pesar de que la historia en sí misma no es un alarde de originalidad, la forma en la que está llevada hace que te olvides un poco de la trama y
que disfrutes realmente con las vivencias de Charmaine y el mundo mágico que la rodea. La narración es fluida y adictiva, por lo que no será difícil devorar páginas hasta llegar al final. A esto ayuda el estilo optimista y jocoso con el que están escritos tanto los diálogos como las descripciones. Muchos pensarán que el libro no está a la altura de sus predecesores, pero está escrito con tan buen gusto y con tan pocas pretensiones que cuesta encontrarle fallos serios. Quizás el mayor problema que tiene la novela es su desenlace, que parece bastante apresurado, pero por lo demás todo es más que correcto.En definitiva, La casa de los mil pasillos es un libro que derrocha alegría, humor, magia y aventuras por los cuatro costados, cuya gracia reside en cómo están contados los hechos, no en estos en sí mismos. El estilo de la autora la convierte en una novela apta para todos los públicos, de modo que si quieres leer algo ligero, entretenido y de calidad, este libro es una opción que tener en cuenta.