Revista Opinión

La fuerza de la plaza Tahrir

Publicado el 28 diciembre 2012 por Mklnoiticias @mikelsecada

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Revolución egipcia el Día de la ira, 25 de enero de 2011.


El 25 de enero del 2011 comenzaron las primeras manifestaciones en la Plaza Tahrir de El Cairo (Egipto) por el exceso de la brutalidad policial, leyes, las altas tasas de desempleo, la corrupción y la falta de libertad de opinión fueron los orígenes de la Revuelta egipcia. Aquel día, bautizado como el “Día de la Ira”, sacó a las calles decenas de miles de egipcios que lucharon contra su presidente, Hosni Mubarak, que llevaba en el poder 30 años y estaba preparando la sucesión en el cargo a su hijo, Gamal. Pero la sucesión nunca llegaría. Después de 18 días de protesta la Plaza Tahrir, o la Plaza de la libertad como se le bautizó entonces, vio como consiguieron derrocar a Mubarak, cuando el 11 de febrero del 2011 anunciaba su dimisión. "El presidente Mohamed Hosni Mubarak ha decidido renunciar a su cargo de presidente de la República y ha encargado al Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas administrar los asuntos del país", dice textualmente el breve mensaje de Suleimán, vicepresidente del país, en un mensaje de 30 segundos. La Plaza Tahrir vivió con emoción y euforia la renuncia de Hosni Mubarak que renunciaba a su cargo a los 82 años. Gran parte de este éxito lo tuvieron la generación joven egipcia que se movilizó a través de las redes sociales (Facebook y Twitter), jugando éstas así un papel importante. "No puedo creerlo, el pueblo egipcio se ha sacado el yugo", gritaba una activista en la plaza aquel 11 de febrero del 2011. Los jóvenes egipcios lucharon y se movilizaron, pero la población les siguió siendo un levantamiento popular apoyado por la mayoría de la población civil. Hoy, dos años después, la Plaza Tahrir vuelve a rugir contra su Presidente, en este caso Mohamed Mursi, quien llegó al poder a través de las primeras elecciones legislativas de la era post-Mubarak. Mohamed Mursi, aprovechando el éxito de su gestión al frente de la crisis Israel-Gaza, aprobó su Decreto, el Decretazo más bien, que le concedía poderes casi absolutos. Mursi pensó que ese era un buen momento aprovechando que el mundo miraba hacia la Franja de Gaza, donde el régimen israelí estaba haciendo volar por los aires los Derechos Humanos de los palestinos. Pero el pueblo que le aupó al poder, el pueblo egipcio, no aceptó su decreto y ante el temor de volver a un régimen absolutista decidieron salir a la calle, como hicieron hace dos años.

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Un mensaje a Morsi confeccionado con la portada de la revista Time: "Time to go" (Hora de irse)

Tras siete días de protestas en las calles, el 6 de diciembre de 2012 en un mensaje televisado intento calmar los ánimos: “Llamo a los líderes de los movimientos y partidos políticos a reunirnos el sábado para dialogar”. La oposición, El Partido de la Constitución, la Asociación Popular egipcia, el Movimiento Socialista Revolucionario, el Movimiento del 6 de abril, el Partido Liberal egipcio y el Partido Social Demócrata egipcio, rechazaron el diálogo si no desechaba su decretazo. El sábado 8 de diciembre en la mesa de dialogo nacional Mursi anunció una nueva ley que anulaba la del 21 de diciembre, que otorgó al presidente egipcio unos poderes excepcionales “para defender la revolución”. La derogación de la Ley del 21 de diciembre es fue una de las principales exigencias para sentarse a negociar. La otra exigencia, la aprobación de la Carta Magna seguirá adelante y se votará el próximo 15 de diciembre en un referéndum. Si los resultados del referéndum rechazan la Constitución en los próximos tres meses se formará una Asamblea Constituyente que redacte un nuevo texto en los próximos seis meses. Y ya se sabe que cuando el pueblo pierde el miedo, el tirano pierde el poder. Seguir a @mikelsecada

*Reportaje publicado en infronteras.com


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