La indecencia de Nery Santos Gómez

A principios del año 2020 como parte de un recorrido de escritores a cargo de la editorial Sial Pigmalión dirigidos por su editor y presidente Basilio Rodríguez Cañada, tuvimos el inmenso placer de visitar el Instituto de Educación Secundaria Lacimurga Constantia Iulia en Navalvillar de Pela, Badajoz, Extremadura, donde junto al novelista Roberto Gil de Mares, el impresor y también escritor Jesus Herrera del Cura y nuestro editor Basilio, estuvimos conversando con los alumnos y profesores en una charla muy agradable donde además de pasar un buen rato, todos aprendimos un poco. Nos sentimos alagados que los alumnos hubiesen leído nuestras obras y estuviesen listos para hacernos una serie de buenas preguntas. 

La profesora Ana Parralejo Rodríguez, preparó una hermosa y reflexiva presentación de nuestras personas, donde demostró el conocimiento de nuestros libros así como su extraordinaria forma de analizar para después enseñar.  

Quisiera compartirles lo que la profesora Ana Parralejo dijo respecto a mi libro “Al borde de la decencia”, pues captó exactamente lo que quise reflejar en la obra: Transcribo (con su permiso profesora):

“Hemos estado leyendo en clase algunos de los cuentos de “Al borde” y no vamos a negar que nos ha hecho reflexionar…

Nos hemos planteado, claro está, qué es la decencia… ¿Es aquello que traspasa la moral  y las buenas costumbres en relación con el amor y el sexo?… Es lo que podríamos deducir a juzgar por el premio que ha recibido el libro (Premio internacional de literatura erótica Anais Nin 2019) o incluso por la portada…

Ahora bien…al adentrarnos en sus historias, nos hemos dado cuenta de que la indecencia tiene otras caras, y la bordeamos… o somos descaradamente indecentes… siempre que nos atrevemos a enfrentar nuestro ser individual a lo socialmente establecido. Hemos comprobado en estas páginas que es indecente tratar de huír de la monotonia de un matrimonio ejemplar, luchar con el propio cuerpo para conservarlo delgado y esbelto, ayudar a morir cuando ese cuerpo ya no responde, dudar entre la homosexualidad o someterse a un casamiento de lujo, atreverse a escribir sobre lo que puede “escandalizar a la Iglesia o a la vecina de enfrente”, o, simplemente, ofrecer una versión distinta a la oficial sobre los modelos que inspiraron a don Miguel en la creación de sus personajes universales”.

Doy las gracias por este análisis y la charla extraordinaria que tuvimos después de esto y deseo este año poder visitarlos de nuevo. Agradecida y contenta de comprobar que los jóvenes sí leen y se cuestionan y que sus maestros, como la profesora Ana y los otros maestros del Instituto Lacimurga, son guía y faro incitando a la crítica y el pensamiento. 

Se me ha preguntado en diversas ocasiones que es para mi la decencia. 

Voy a responder con la dedicatoria que hice en ese libro a mis tres hijos: Pedro Daniel, Pedro Gabriel y Gabriela María Gómez Santos:

“Se pasa uno la vida enseñando a sus hijos a seguir los caminos de la decencia. Hasta que uno descubre que la verdadera decencia está en enseñarles a no faltarse el respeto a su propia naturaleza y a sus convicciones, así como a cultivar sus dones hasta hacerlos florecer”. 

En la contraportada del libro los editores dicen: 

“Con el advenimiento de nuevas costumbres en la sociedad, las fronteras de la decencia han devenido más flexibles e inestables, hasta el punto de convertirse en indiscernibles. No obstante, siguen existiendo barreras que reclaman frenos para el deseo y normas para la acción, que se ven desafiadas por los difíciles y seductores umbrales de la indecencia”.

Critica, cuestionamiento, cambio, trascendencia, umbrales, bordes, barreras, transgresión, límites… es lo que define el trasfondo de los temas que escribo… Fronteras… no es de extrañar que  “Fronteras desdibujadas”… sea el nombre del libro que estoy presentando en esta Feria del libro de Madrid 2021.