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La CIA en su lucha contra Al Qaeda logra detectar y mediante un misil enviado desde un avión no tripulado acaba con el líder en Yemen, y posible heredero de Osama Bin Laden Anwar Al-Awlaki. De nacionalidad estadounidense y capaz de comunicarse en árabe era un clérigo que desde las redes sociales y medios de comunicación lograba aleccionar y animar los atentados contra EEUU y, en general, contra todo occidental o musulmán de acuerdo a su radical punto de vista de la vida y la religión.Esta actuación habrá evitado, con seguridad, la expansión de las ideas islamistas que como en una autopista se extiende desde Pakistán o China hasta Mauritania pasando por las ex repúblicas soviéticas y evitara que la organización, Al Qaeda, logre seguir atentando, y amenazando, al mundo con su violencia terrible y absolutista.La guerra al terror iniciada con el horror del 11S por el presidente George W. Bush para detener la amenaza que en el propio territorio americano asesinó a cerca de tres mil inocentes continúa con mecanismos y actuaciones propios de la guerra 2.0, la guerra del siglo XXI, que pasa por encima de los derechos y deberes de la democracia para asegurar una seguridad que ni aún así se asegura y que como decía en la famosa frase de Benjamín Franklin solo augura un notorio aumento del poder de un estado poco controlable.Porque esta es la segunda parte del pensamiento. El gobierno estadounidense da la orden de acabar con la vida de Al Awlaki, nacido estadounidense, sin juicio ni intervención judicial porque es un terrorista, juzgando y condenando antes del pertinente juicio y la aportación de las evidencias que se mantienen como secretas y desconocidas.La presunción de inocencia y el derecho a un juicio justo que como parámetro básico defiende la constitución estadounidense, en su quinta enmienda, quedan conculcados. Esos principios que constituyen la primera constitución liberal y garantista del mundo, desde 1787, se ven superados por la aplicación de la lucha contra el terror eliminando esa protección básica del ciudadano frente al estado por mucho que ese ciudadano sea un criminal. El hecho de que tenga la doble nacionalidad estadounidense y yemení enfrenta, directamente, el hecho jurídico de la defensa de los nacidos en EEUU aunque en el caso de que fueran extranjeros, como en muchos casos han sido, no cambiaría el hecho ni la situación.Este segundo hecho, no el primero, es el que preocupa. La valoración positiva de la sociedad, las sociedades, frente a este hecho de terrorismo de estado contra un terrorista terrible. La suspensión de los derechos de los ciudadanos y las garantías que augura un futuro de perdida de esas libertades alcanzadas durante siglos por el terror y el terror de estado. De hecho la disminución del papel del ciudadano frente a los lobbies, los estados, los poderes se manifiesta, en último término en este caso casi "meridianamente" claro. ¿Habremos de ver como nos lo aplican a cada uno de nosotros como Josef Ks ignorantes?El riesgo de esta aceptación, los asesinatos selectivos, de este silencio en los medios de comunicación y de pensamiento por la realidad de la lucha contra la violencia con más violencia nos deja indefensos y eso puede llegar a convertirse en un peligro mayor incluso que la sombra del miedo provocado por los terroristas que se cierne sobre nosotros contagiándonos de su involucionismo terrible.Terror y más terror en Recuerdos del día de mañana.Imagen: http://www.lostiempos.com/diario/actualidad/internacional/20111001/muere-anuar-al-awlaki-enemigo-publico-de-eeuu_143882_296694.htmlDespierte el alma dormida, avive el seso e despierte.
A fin de cuenta sino pensamos y vivimos para que queremos estar.
Los pensamientos de hoy son recuerdos del mañana que tenemos hoy.