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L.A. Noire. Análisis.

Publicado el 18 julio 2011 por Portalgameover
L.A. Noire / Rockstar - Team Bondi / PS3 - Xbox360

L.A. Noire / Rockstar - Team Bondi / PS3 - Xbox360

¿Os habeis dado cuenta? No importa su tematica, no importa su estilo; cualquier título en el que este metido de una forma u otra Rockstar es sinonimo de un seguimiento casi enfermizo y obsesivo por parte tanto de crítica como de fandom.
Da igual de que vaya el asunto, siempre empieza a hablarse del título meses, incluso años antes de su lanzamiento; páginas y revistas le dedicarán reportajes especiales durante semanas y las putitas como Bene se pasaran las horas contando los días que faltan para la ansiada fecha de lanzamiento.
A veces esa notoriedad hace honor al producto final, pero otras veces ese mismo hype acumulado durante meses acaba por decepcionar a una gran mayoría.

L.A. Noire, el titulo desarrollado por Team Bondi bajo la batuta de la veterana productora neoyorquina, no es excepción.
Ha pasado por todas las fases tradicionales en un juego amparado por Rockstar y ha sido particularmente noticia por el enorme trabajo de ambientación de una urbe de los años cuarenta y por las capturas faciales de sus protagonistas.
Pero las reacciones, como manda la tradición, al final han sido más que dispares.

Excelente trabajo, Señor Phelps...

Excelente trabajo, Señor Phelps...

Ambientado en Los Angeles de los años cuarenta tras el fin de la Segunda Guerra Mundial, en L.A. Noire encarnamos a Cole Phelps, antiguo teniente del ejercito caído en desgracia que ha acabado trabajando en la Policia de la ciudad.
Tras varias acciones meritorias Phelps es ascendido a Detective, primero a la división de Tráfico y posteriormente ascendido a diferentes departamentos como Homicidios o AntiVicio.
En cada uno de esos departamentos tendremos varios casos por resolver que habitualmente orbitaran primero en pequeñas subtramas y posteriormente en una gran trama principal que irá desarrollandose durante el titulo para desenlazarse en los últimos capitulos del juego.

Estos casos por si solos, reflejados en la forma de capitulos supuestamente autoconclusivos, cuentan con buenos guiones y desenlaces, pero son esas subtramas las que no acaban de cuajar.
Algunos recordarán como critiqué en su día que tenía la sensacion que “Red Dead Redemption” no estaba bien escrito… Que le faltaba una clarisima estructura de presentación-nudo-desenlace y que nunca acababas de saber cuando el juego estaba a punto de acabar y cuando aún quedaba historia por delante.
Esa sensación es tal cual en L.A. Noire.
Esa gran trama principal hay momentos en que no tiene ni pies ni cabeza y algunas de las subtramas, que son bastante más interesantes que la principal, son resueltas con pretextos baratos que distan mucho de la epicidad que uno espera de un título así.
La historia, como en RDR, da la sensación de estar desordenada, mal contada… Exagerando un poco, casi os diria que el juego ganaría si pudieramos reproducir los DVDs de la versión de 360 en un orden distinto al original.

Phelps, un detective MUY profesional

Phelps, un detective MUY profesional

Es dificil contar porque afirmo todo esto sobre la historia del juego sin entrar en spoilers ni chafar el título a los que aún no lo hayan probado. Pero valga como mínimo afirmar que esos capítulos, dejando la trama general a un lado, son autoconclusivos y están bien escritos.
De hecho, como afirmaban los amigos Cromaticos, seguramente el juego hubiera ganado de simplificar su acción en capitulos sin grandes tramas de por medio.

El desarrollo de estos casos suele ser común, aspecto que ha suscitado no pocas criticas ya que no se puede negar que el juego es bastante repetitivo.
Tras presentarnos el caso procedemos a investigar la escena del crimen, recogiendo botellas inservibles y pistas. Interrogaremos a los testigos y empezaremos a indagar por toda la ciudad.
Encontraremos al primer sospechoso, que huirá y al que interrogaremos tras pillarle. El segundo sospechoso, pese a no tener nada que ocultar, también huirá al vernos1 e iremos encontrando nuevas pistas hasta capturar algún sospechoso más y endosarle el marrón.
En casos con más de un sospechoso tendremos que decidir a cual acusar y tras una pequeña escenita cerraremos el caso y continuaremos al siguiente.

Desgraciadamente, y sin entrar de nuevo en spoilers, la sensación de estar acusando a un inocente, sea cual sea nuestra decisión, acompaña durante la mayoría de casos.
En algunos de esos en que hay que elegir culpable, el recurso es demasiado barato y digno de una mala serie televisiva… ¿A quien elegirás, al hombre que nunca ha roto un plato padre de familia responsable al que señalan todas las pruebas, o al violador reincidente al que la policia lleva meses persiguiendo pero cuya culpabilidad no puede demostrarse?
Facil, un recurso demasiado facil.

Cuanto más sospechoso sea el personaje, menos pruebas tendremos en su contra...

Cuanto más sospechoso sea el personaje, menos pruebas tendremos en su contra...

Venden el título como un SandBox y no pocos aficionados han querido hacer notar sus parecidos con títulos similares de Rockstar, pero L.A. Noire es por encima de todo un juego de investigación.
Algunos lo han comparado con Phoenix Wright, aunque yo tampoco diría tanto; hay ciertos paralelismos, como el buscar pistas y utilizarlas para demostrar que los testigos mienten, pero más allá de eso los parecidos son anecdoticos.

Un Sandbox sí, porque tendremos libertad para movernos libremente por la enorme ciudad sin problemas, pero en el fondo un Falso Sandbox, como lo era también Mafia 2, título con el que ha sido repetidamente comparado.
La ciudad es enorme, sí, y no hay ataduras, pero las recompensas por explorar la ciudad son inexistentes.
El título es puramente lineal, vamos de punta a punta del escenario investigando las diferentes pistas y por mucho que la caguemos, el juego siempre acabará reconduciendote por el buen camino. Algunos jugadores menos habiles tendrán que dar más vueltas pero siempre acabarán en el mismo desenlace.
El único interés de la ciudad, más allá de los caminos precocinados de cada caso, son 40 pequeños casos callejeros que se resumen en tiroteos, perseguir gente que corre y poco más. Las quilometricas distancias que pueden separar algunos de ellos nos harán pensarnoslo dos veces antes de aceptarlos.

Los Ángeles, una ciudad fabulosamente detallada

Los Ángeles, una ciudad fabulosamente detallada

El título siempre acaba reconduciendote por mal que hagas tu trabajo, e incluso en los tiroteos y persecuciones el mismo juego te permitirá saltar la escena si no conseguimos pasarla tras varios intentos.
Eso no implica que el título no tenga cierta dificultad y por eso en Team Bondi decidieron incorporar al juego varias ayudas musicales, ayudas que los autenticos amantes de la novela negra pueden desactivar en cualquier momento.
Por ejemplo, investigando un escenario sonará una tétrica musica hasta que no hayamos encontrado todas las pistas importantes para el caso, o en un interrogatorio, una melodia nos revelará si hemos acertado en nuestras conclusiones o no.
Es un recurso muy inteligente, especialmente en un juego que puede llegar a fustrar mucho.

Porque los interrogatorios, la salsa especial con la que se vende el título, pueden llegar a ser muy, muy fustrantes.
En el fondo son muy sencillos, tenemos varias dudas sobre el caso en cuestion, seleccionamos cual queremos y el testigo o sospechoso pasará a responder. En ese momento, tenemos basicamente tres opciones. Creernos al sospechoso, lo que puede ayudar a sonsacar más información, dudar de su testimonio y meterle un poco de miedo en el cuerpo o demostrar que miente presentando alguna pista como prueba.
Muy simple sí, pero ambiguo en ocasiones, pues mientras la opción de Verdad es muy evidente, la frontera entre Duda o Mentira puede ser muy difusa, y un interrogatorio bien orquestrado puede irse completamente a pique por tomar la decisión equivocada.

L.A. Noire. Análisis.

"A veces hay que agitar el arbol para ver que cae..."

Decían en Team Bondi además, que equivocarse muchas veces en el interrogatorio podía girar al interrogado en tu contra, pero yo no lo he notado así.
Los interrogados en L.A. Noire, así como el propio Phelps, parecen bipolares sacados de un manicomio. Tan pronto nos dan cordialemente los buenos días como nos mencionan a la misma madre. El mismo Phelps, decía, es el rey del bipolarismo, capaz de pasar de un candido y amable poli bueno a un feroz y desalmado poli malo.

El mayor logro de los interrogatorios pero, es sin duda ese celebrado trabajo de captura facial. No exageraban cuando aseguraban que en L.A. Noire podemos saber si nos mienten o no según los gestos de los interrogados.
Es cierto, el grado de captura de movimientos faciales es perfecto, dejando en pañales a hitos en este terreno como Mass Effect; es algo nunca antes visto.
Y aunque es cierto que los actores exageran, especialmente al principio sus gestos, para indicarnos claramente lo que traman, no se puede negar que son una ayuda muy clara para resolver esos interrogatorios.

Aunque unos cuantos personajes no pueden con sus caras de estreñido...

Aunque unos cuantos personajes no pueden con sus caras de estreñido...

Junto a esas capturas faciales, interpretadas por algunos actores de renombre como Aaron Staton (habitual en Mad Men), otro de los principales atractivos del juego es, sin duda, la ciudad.

La ambientación de la urbe americana en los años cuarenta es, sencillamente, perfecta. Aseguran sus productores que hay detrás un gran trabajo de investigación de fotografías de la época; yo no se si tanto pero es evidente que el juego lo clava en ese sentido. Su ambientación, tanto visualmente como a la hora de narrar los hechos, es excelente, soberbia.

Desgraciadamente, a veces la ciudad es demasiado grande, excesivamente amplia para un título puramente lineal. Recuerdo viajes de hasta un cuarto de hora para recorrerla de punta a punta en coche…
Esto no se si contarlo como algo malo, pero lo que para mi sí son defectos son, junto a los ya mencionados, que se nota demasiado esa base del motor de Grand Theft Auto 4.
El sistema de conducción, el de cubrirse en los tiroteos, entre otras pequeñas cosas, estan directamente sacados, y se nota, de la última entrega de GTA. Con todas sus ventajas sí, pero también todas las desventajas de un título de hace no pocos años.

¡Dale gas!

¡Dale gas!

Y poco más puedo decir. L.A. Noire es un juego muy grande, pero quizá no tan variado como debería y rapidamente se nota la excesiva repetición de la misma formula.
El trabajo de investigación, dejando a un lado las puñeteras botellas, esta muy bien, y aunque las tramas quedan en mi opinión mal resueltas, la disposición en capitulos funciona de forma más que correcta.
A nivel técnico es excelente, nadie puede negarlo, aunque a veces eso no es suficiente. La ambientación es increible y una verdadera gozada para los amantes del genero.
Pero tiene defectos, algunos más notables y otros más excusables…
De todas formas, es curioso que aún así sea posiblemente uno de los mejores juegos que hemos probado este año, lo que me hace pensar…

Resumiendo, excelente apartado técnico, repetitivo en algunos aspectos, serios problemas de narrativa y en general divertido. Puedo criticarlo mucho, pero la verdad es que me ha tenido enganchado hasta el final.

L.A. Noire. Análisis.


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