Aire nuevo se respira en la Selección Española femenina de fútbol desde que llegó Jorge Vilda para hacerse con los mandos. Tras el triste Mundial y la polémica con el veterano Ignacio Quereda, seleccionador desde 1988, fue relevado en busca de la renovación de sistemas, ideas o métodos de entrenamientos que solicitaban las jugadoras.
Ascendió el joven Vilda, que contaba con siete años cuando su predecesor llegó al cargo, y que llevaba desde 2009 dirigiendo las categorías inferiores del fútbol femenino federativo. Acredita Vilda tras su debut en doble partido en China contra el combinado local dos victorias, 1-3 el pasado viernes y 1-2 ayer lunes, que cargan de razones a quienes pedían un cambio en el timón nacional. No solo han llegado dos victorias contra un combinado de cierto nivel, es que han llegado acompañadas de un juego más fresco, más moderno, más elaborado que el visto en el último Mundial con Quereda.
Además, Vilda no ha podido contar con la estrella de la Selección, Vero Boquete, ni apenas con Jenni Hermoso (lesionada a los 20 minutos del primer amistoso). Dos bajas importantes que la Selección no tuvo que lamentar, a pesar de que el técnico repartió minutos y varió alineaciones entre ambos partidos. Para el segundo partido de la gira, disputado ayer, formó de salida con un 4-3-3 que daba el eje del mediocampo a Virginia Torrecilla con Silvia Meseguer y Amanda Sampedro como interiores, Alexia y Priscila abierta a banda y la goleadora Mari Paz Vilas, como ariete.
Las chinas, conscientes del estilo de toque y dominio que ejercieron las españolas en el primer encuentro, salieron bien pertrechadas atrás, con dos líneas juntas que dificultaban la movilidad rival en tres cuartos de cancha, y con la clara idea de aprovechar su velocidad al contraataque buscando balones profundos a la espalda de las centrales. Así, se fueron sucediendo llegadas de las locales hasta que a los 7 minutos la guardameta Sandra Paños repelía un mano a mano pero no podía evitar que en el rechace Xu Yanlu adelantara al equipo asiático.
Fieles al nuevo estilo, el combinado español continuó apoyándose en el toque y la combinación, a lo que agregaron una fuerte presión con adelantamiento de líneas cuando se perdía el balón con el fin de recuperarlo en zonas de ataque. Encomiable y atractiva idea futbolística, propia de un equipo dominante. Esto volcó el juego sobre campo chino, aunque con pocos resultados.
Cierta falta de precisión cuando se trataba de profundizar en la zona de tres cuartos, ahondada por el lamentable estado del campo, impedía que el buen camino que había tomado el juego español provocara ocasiones de gol, a pesar de los intentos por desbordar, sobre todo, de la siempre vertical y habilidosa Alexia por banda izquierda. Mapi Vilas, emboscada entre una jaula de jugadoras chinas, tan solo pudo aparecer en el minuto 34 para conectar un flojo remate de cabeza a las manos de Zhang Yue.
Un detalle táctico, como fue el hecho de retrasar hasta el mediocampo a Alexia y Priscila para que arrancaran con más campo por delante, liberar a Amanda para moverse por todo el frente de ataque por detrás de la punta Vilas, y acercar a Meseguer para que conectase y colaborase con Torrecilla, logró que España fuera algo más profunda, posibilitando que Leire e Irene llegaran a posiciones de ataque desde el lateral.
No obstante, eso aumentó el riesgo a la espalda de nuestra defensa, donde una atenta y veloz Marta Torrejón conjuró el peligro en alguna ocasión. Con el tiempo cumplido, una falta botada desde banda derecha por Alexia, en la que Torrecilla entró de cabeza provocando el fallo en el despeje de una defensa, cayó botando a Amanda que, con una volea alta nada fácil de ejecutar, posó el balón en la portería local. Empate al descanso, buena imagen y buen resultado, sobre todo unido a la victoria de unos días antes.
En el propio descanso y durante el segundo tiempo, el constante carrusel de cambios no modificó el sistema, con Amanda cada vez más liberada y mayor presencia de las laterales. No obstante, el gran trabajo defensivo chino resultó molesto para un equipo español visiblemente desgastado por el largo viaje, los dos partidos, el estado del campo y los días de concentración. Además, los buenos resultados en una gira que, al fin y al cabo, era amistosa, tampoco invitaban a un mayor desgaste.
Esto bajó notablemente el ritmo del partido, sin que impidiera que se pusiera de manifiesto la necesidad de seguir trabajando la presión alta española, ya que un desajuste a la hora de adelantar líneas dejó a la central Ivana varios metros por detrás de sus compañeras, rompiendo el fuera de juego, y habilitando a Wang, quien, completamente sola ante Paños, definió horrorosamente en el minuto 72, evitando que China volviera a adelantarse. Con el partido finalizando, en el minuto 88, China volvió a tener la victoria con un cabezazo desde la frontal del área pequeña que se marchó desviado casi por arte de magia.
Así que, con el empate como resultado aparentemente definitivo, un último empuje en la presión española provocó un saque de banda tras un error de China en la salida de balón. El esférico llega a pies de Sonia Bermúdez que, con su magistral diestra, pone el balón a la entrada de Natalia Pablos quien, con un magistral cabezazo, de manual, marcando los tiempos, picó el balón al fondo de las mallas ya en el minuto 93.
Dos partidos en casa de un buen rival, dos victorias, una idea de fútbol vistosa y atractiva. La nueva era Vilda arranca con buen pie y con el apoyo de las jugadoras, augurando la continuidad en la exitosa progresión de nuestro fútbol femenino.
Por cierto, mientras algunos tuvimos que buscar por internet la señal de una televisión china para poder ver el partido, la cadena pública Teledeporte se dedicaba a repetir el Real Sociedad – Espanyol del pasado sábado. Y los partidos de la Liga femenina ni los busquen porque, salvo honrosas excepciones, no hay televisión. Señores de la Federación y del Consejo Superior de Deportes, tan acostumbrados a no ponerse de acuerdo ¿no se dan cuenta de que lo que no sale en televisión no existe? ¿no sería el momento de dar difusión al fútbol femenino? Hagánselo mirar…