Revista Salud y Bienestar

La obesidad en el trasplante renal

Por Ana46 @AnaHid46


La obesidad en el trasplante renal El aumento de peso en el trasplante renal es algo bastante común, sobre todo al principio del injerto. La medicación, sobre todo los corticoides, el cambio de alimentación, de restringida a prácticamente normal, y el buen estado físico que hace que aumente nuestro apetito, son factores importantes a la hora de poder mantener el peso adecuado.

 El paciente trasplantado debe tener claro que está en su mano el controlar su alimentación y mejorar su calidad de vida. Es importante saber que el aumento de peso y la hipertensión arterial, además de perjudicar a nuestro riñón, son factores elevados de riesgo cardiovascular.
 Existe una clara relación entre la obesidad, el aumento de la tensión arterial y la elevación del colesterol, por lo que es muy importante controlar las grasas con una dieta adecuada.
 Los pacientes trasplantados obesos padecen angina de pecho o infarto de miocardio con mayor frecuencia,   y la cardiopatía es la principal causa de muerte; además aumenta la posibilidad de la pérdida de injertos funcionantes en estos pacientes.
 La administración de corticoides aumentan el apetito y contribuyen a la ganancia de peso después del trasplante, por eso el paciente debe ser consciente de que una buena alimentación mejorará su calidad de vida y la de su trasplante.
 Si no se cuida es muy fácil que desarrolle sobrepeso y obesidad. Para evitarlo, hay que seguir una dieta equilibrada y hacer ejercicio de forma regular.
 El ejercicio es muy importante, porque además de prevenir la obesidad, fortalece los músculos, huesos y articulaciones, favorece la agilidad y la flexibilidad, mejora el estado de ánimo y disminuye el estrés.
 Por eso os animo a que lleveis una vida sana con una dieta equilibrada y ejercicio regular. Ya sé que a veces cuesta, pero vuestro órgano trasplantado y vuestra calidad de vida se verán recompensados.
Ana Hidalgo


Volver a la Portada de Logo Paperblog