La cuarta ola es el silencio previo al final y nunca, jamás, querrás escuchar otra cosa, porque cuando lo hagas estarás muerto. Pero algo está cambiando, Cassie está siendo vigilada por alguien, una persona que entra en su escondrijo cuando ella no está, que lee sus diarios y atesora sus recuerdos más íntimos y profundos. Una presencia que podría ser su perdición o su única esperanza.
La Quinta Ola es una novela, como bien indica Booklist "sincera, violenta, paranoica, épica". Violenta más que Los Juegos del hambre, paranoica hasta decir basta y épica hasta llenar los bolsillos de una docena de juglares. Nadie está a salvo de la locura, porque ni siquiera el propio lector podrá descubrir la verdad hasta pasada una gran parte del libro. Así que cualquier personaje puede convertirse en "Dorothy" y matar a tiros a todo aquel que le lleve la contraria. Pero sobre todo, es una novela que hay que saborear con lentitud, que podrás odiar o querer releer. Para que a mí me enganchase de verdad, tuve que recorrer doscientas páginas introductorias, que terminas comprendiendo que son necesarias. A partir de aquí, el ritmo se vuelve más intenso, trepidante, demoledor hasta ponerte la piel de gallina.
"-No me beses. Él me coge en brazos. Es como si subiera flotando para siempre, como cuando era pequeña y mi padre me lanzaba hacia arriba, y tenía esa sensación de que seguiría subiendo hasta llegar al borde de la galaxia. Me deja en la cama. -Si me besas otra vez, te daré un rodillazo en las pelotas-le digo antes de que vuelva a besarme. Sus manos son tan suaves que parecen irreales, como si me tocara una nube. -No permitiré que...-Hace una pausa, en busca de la palabra adecuada-.Que te vayas volando, Cassie Sullivan." (Pág. 195)
Por otro lado, el argumento está dividido en distintas historias contadas por cuatro personajes diferentes que terminan confluyendo en una, como piezas de puzzle, con lo que es muy importante llevar un guión de personajes, así como de la línea de tiempo que en ocasiones resulta difícil de seguir por los continuos flashback que hace la protagonista de su pasado al comienzo. Pero sin duda, lo que más me ha emocionado de esta historia ha sido el papel de Evan Walker, el chico dividido en dos tan perfecto y a la vez tan "trágico" que se enamora de Cassie. Creo que podría dedicarle palabras durante horas a Evan, a sus ojos y aliento de chocolate, a sus abdominales bien hechos o a sus profundos diálogos con Cassie. Si una chica no se derrite ante él, desde luego debe ser alienígena. Pero no es el único que ha capturado mi corazón. Sammy también me ha hecho estrujar las páginas en las que mostraba su valía a pesar de su corta edad, es la definición de monería absoluta. Y, desde luego, el Oscar a la actuación más sufrida se la lleva el señor osito de peluche, quien ha tenido que pasar por mucho hasta el final.
"A pesar de haber reducido mi equipaje a lo mínimo, me cuesta meter al oso en la mochila. A lo mejor le corto las patas y le digo a Sammy que se las voló en pedazos el Ojo que acabó con el Campo Pozo de Ceniza." (Pág. 350)
En definitiva, La Quinta ola es pura tensión. Una novela oscura, sobrecogedora y altamente visual, con unos diálogos ingeniosos que muestran a un reparto protagonista de lujo, y que tiene como telón de fondo un sombrío mundo a punto de extinguirse, en el que alienígenas y seres humanos deberán enfrentarse hasta sólo existir una raza. Si os gustó The Host (El Huésped) esta obra no puede faltaros.
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