Revista Cultura y Ocio
Esta canción es uno de los últimos regalos que nos dejó durante su larga carrera la inolvidable Celia Cruz. Que triste que las futuras generaciones no van a poder entender el efecto que ella dejó en nuestras vidas. Sus canciones siempre llenaron los corazones de orgullo, de inspiración, promovieron la cultura, la unidad y las cosas buenas y sanas de la vida. En lugar de cantar de despecho, adulterio y frivolidades, ella unificó a todos los latinos en un solo canto y en un solo corazón. Que viva Celia!Soy terrícola, secularista y humanista.