Tal vez fue en esos años cuando Lalu alcanzó su mayor popularidad. Participó en una película, los actores secundarios con poco talento de Bollywood se pusieron a imitarle, se hicieron muñequitos con su imagen (los “laluji”), su estilo de peinado causó furor y fue solicitado con profusión a los peluqueros, una website dedicada a la búsqueda de parejas recibió el nombre de Lalu y de su mujer (www.laloorabri.com), salió un chocolate con su caricatura en el envoltorio, produjeron un paquetito con cosméticos baratos llamado “Lalu va a casa de sus suegros” que causó sensación entre las jóvenes del campo de Bihar, otra empresa de Bihar produjo un pienso para ganado al que llamó “Lalu Pashu Aahar” que fue un éxito y es que parece que pienso que toca, pienso que Lalu convierte en oro. Se convirtió en un símbolo de la cultura popular, en la que sabes que has triunfado cuando se ponen a hacer chistes sobre ti. Algunos chistes sobre Lalu (he escogido los más originales y los mejores de los muchos que circularon, ya que la inmensa mayoría eran refritos de chistes viejos):
+ Una delegación japonesa visita Bihar. Los japoneses se llevan las manos a la cabeza ante lo que ven y le dice: “Si nos deja, podemos hacer de Bihar otro Japón en tres años.” Lalu replica: “¿Y a eso le llamáis eficiencia? Yo puedo hacer de Japón otro Bihar en tres días.”
+ Once Laloo was coming out of Airport. As there was huge rush the security guard told Laloo "WAIT PLEASE" for which Laloo replied "65Kgs" and moved on... (Lo siento, pero para conservar el juego de palabras, lo tengo que escribir en inglés).
+ Consejo de Lalu sobre la planificación familiar: “No tengas más de un hijo al año”.
+ Lalu está sentado a la barra de un bar junto a dos parroquianos. Dice el primer parroquiano: “Johnnie Walker, solo”. Dice el segundo: “Jack Daniels, solo”. Cuando el camarero se le acerca, Lalu dice: “Lalu Yadav, casado.”
Los chistes son muy normalitos y desde luego tienen menos gracia que algunas de las declaraciones del propio Lalu. Como, por ejemplo, que tuvo dos hijos y siete hijas para protestar contra las estirilizaciones forzas ordenadas por Indira Gandhi. No sé, conozco otras formas de protesta que no implican pasarse más de una década cambiando pañales. A su hija mayor le puso Misa Bharati por la Maintenance of Internal Security Act, que permite a la policía realizar detenciones sin permiso de los tribunales. Menos mal que no decidió llamarla en conmemoración del Shared Healt International Treaty. Otras declaraciones de Lalu que han pasado a los libros de Historia:
+ “Si no ordeñas a la vaca, se enferma” (¿Dijo ordeñar o esquilmar?).
+ “El vagón es el caballo que hace que los Ferrocarriles se ganen el pan. Cárgalo adecuadamente. Haz que corra y no lo dejes en el establo.”
+ “Mi madre siempre me dijo que no cogiese al búfalo por la cola, sino que siempre lo cogiese por los cuernos. Y he utilizado esa lección en todo en mi vida, incluídos los Ferrocarriles.” (Ya vemos que siente predilección por las metáforas ganaderas).
+ “Sé que algunos dicen que puedo ser peculiar. Pero siempre hay un significado más profundo en lo que digo. Soy un socialista de corazón y tengo los intereses de los pobres en mi mente. Cuando la gente ve cómo me las apaño para salir de situaciones difíciles, eso les da esperanza en sus vidas.” (Cuando un político se pone como ejemplo para los demás, es que ha empezado a subírsele a la cabeza).
+ “Trabajo tanto que si no tuviera todas las comodidades, me volvería loco.” (En general a los políticos les gusta tener todas las comodidaes, trabajen o no trabajen).
+ “No les he dado el cielo [a los pobres de Bihar], pero les he dado voz”. (Algunos piensan que no les dio ni lo uno ni lo otro).
+ “Los Ferrocarriles Indios son la responsabilidad del Señor Vishwakarma. También lo es la seguridad de los pasajeros… Es Su deber, no el mío. Me han forzado a tomar su manto.” (Respuesta cuando le preguntaron por el aumento en los accidentes de trenes. No resulta muy convincente, pero es una salida chula: la Macarena tiene la culpa del cambio climático, San Pancracio la del paro y así…).
Lo malo es que los chistes y los muñequitos con tu efigie no se traducen necesariamente en votos y parece que la carrera política de Lalu ha entrado en el ocaso.
En las elecciones de noviembre de 2005 en Bihar, el RJD quedó en tercera posición y fue el BJP, al que Lalu tanto había vapuleado en Delhi el que se hizo con el control del estado. Parece que uno de los factores que ayudó que la victoria del BJP fuera tan amplia fue que los electores finalmente se habían cansado del desgobierno que Lalu y Rabri habían traído al estado, hoy considerado como uno de los más peligrosos de la India.
Las elecciones legislativas de 2009 fueron una pesadilla todavía peor para Lalu. El RJD perdió 20 escaños y quedó reducido a sólo cuatro en el parlamento nacional. Demasiado pocos para andar jugando a quitar y poner Primeros Ministros. Lo malo es que una vez se pone en marcha la máquina de perder elecciones, ya no hay quien la pare. En las elecciones de Bihar de noviembre de 2010, el RJD volvió a quedar en tercer lugar, pero con sólo 22 escaños de 243, a 69 del segundo partido y a 93 del primero. Ni tan siquiera los musulmanes y los yadavs se dignaron votarle.
Poco antes de las elecciones, cuando ya se barruntaba la derrota, Lalu aún había tenido la osadía de decir: “Pienso que el tiempo de Sonia [Gandhi] se ha pasado. Ha dado la mayor parte de su trabajo a su hijo Rahul. Pero cada vez que Rahul ha hecho campaña y se ha presentado a un cargo, ha perdido.” Y añadió: “Tejaswi [se refiere a su hijo, que es jugador de cricket] es un político nato. Es mucho mejor que Rahul.” Así está bien, que Lalu se dedique a cultivar la carrera política de su hijo, porque lo que es la suya…