Revista Televisión
Cuando la ABC estrenó "Pan Am" en Septiembre, nadie se esperaba que terminase convirtiéndose en el fracaso que ha sido. De estrenarse el 25 de Septiembre con casi 11 millones de espectadores y un 3.1 en demos, a despedirse con menos de 4 millones y un 1.2. Y eso que su mínimo histórico le llevó a marcar un 0.7 en demos y menos de 3 millones de espectadores (la noche en la que los Grammy marcaron su mejor audiencia desde 1990). ¿Merecían "mis panameras" este desprecio por parte de la audiencia? No.
Debo confesar que el Piloto no me convenció. Todo estaba perfecto, sí; pero no me convenció. De hecho, a punto estuve de dar carpetazo a la serie. Pero con estas cosas ya se sabe que hay que tener paciencia y dar un par de capítulos a las series para que consigan convencert. Y así fue. Los viajes a París y Berlín del segundo y tercer capítulo respectivamente hiceron que pasase de llamar "azafatas" a "mis panameras" a las protagonistas de la serie. Y la principal responsable de este cambio fue Karine Vanasse (Colette). La misma que sembró el pánico en Twitter hace unos meses cuando dijo que la serie había sido cancelada (cuando en realidad no lo había sido...todavía). Su Colette tenía cotas inalcanzables de amor puro y duro, y eso que estuvo bastante ausente durante muchos capítulos. Su relación con Dean (Mike Vogel), que comenzó oficialmente en el octavo capítulo (el de la parada en Haití), le ha llevado por el camino de la amargura, pero ha terminado llegando a buen puerto.
El resto de "mis panameras" luchaban por hacerse un hueco en nuestros corazones seriéfilos, aunque partían con desventaja en relación a su compañera francesa. Christina Ricci daba vida a Maggie, la "panamera" enamorada de Kennedy; dispuesta a conseguir sus objetivos al precio que fuese (incluyendo la traición a un compañero para conservar su trabajo). Margot Robbie ha sido Laura (la hermana de Kate). Comenzó abandonando a su prometido en el altar, y ha terminado encontrando el amor en su compañero Ted (Michael Mosley), después de que éste rechazase la estúpida propuesta de Amanda (Ashley Greene). Y en el camino se ha convertido en musa de Warhol. Y por último Kelli Garner (Kate), azafata de día y espía de noche. O viceversa. O todo a la vez. Su trama ha chirriado bastante a lo largo de la temporada, al igual que sus numerosos acompañantes: Jeremy Davidson (Richard, su mentor, amigo y ¿posible amante de haber continuado la serie?); David Harbour (Anderson, su mayor problema); Goran Visnjic (Niko Lonza, su gran amor).
La serie comenzó a perder audiencia de forma alarmante, tuvo un parón bastante largo, y encima, el penúltimo capítulo emitido, lo fue fuera de orden (que una cadena no emita los capítulos de sus series es una falta de respeto y de confianza bastante gorda; precisamente la ABC no es nueva en este tema, ya que la primera temporada de "Happy Endings" fue emitida, casi en su totalidad, en desorden). Todo ello ha terminado desembocando en la más que previsible cancelación de la serie. Una pena, y eso que la serie ha bajado el listón en sus últimos 5 capítulos. Pero guardaré un grato recuerdo, tanto de la serie, como de Karine Vanasse.