Revista Televisión
Fieles a su cita invernal, las zorrupias de mi alma y de mi corazón han regresado con la segunda mitad de su segunda temporada. Su winter premiere es ya todo un clásico de Enero, y recordando cómo quedaron las cosas a finales de verano, las ganas por conocer qué iba a pasar ahora son grandes. Así que, si no sabes que las linternas están para iluminar caras y no móviles tirados en el suelo, no sigas leyendo.
Hanna, Aria, Spencer y Emily se han marcado un "Misfits"; se han enfundado los petos naranjas y se han puesto a hacer trabajos comunitarios (retirando basura, algo muy glamouroso y que puede dar para grandes momentos, o sino recordemos a Susan y Katherine en "Mujeres Desesperadas"). Pero además de limpias, nuestras zorrupias son muy listas, y han jugado al "enfado fingido", consiguiendo que todo Rosewood se piense que están enemistadas; o al menos, que Em y Spencer se odian a muerte (ese bolsazo ha valido su peso en oro). Como viene siendo habitual, las cuatro tienen que hacer frente a sus propios dramas:
- Hanna ha recuperado su amistad con Lucas después de tenerle ignorado. Y Caleb ha regresado tras su periplo familiar. Recordemos que en Rosewood Caleb vive con Lucas, y a éste no le ha hecho ninguna gracia el regreso. Y además, el padre de Hanna (que terminó casándose) se va a mudar a Rosewood junto a Isobel y Kate, su mujer e hijastra. Asi que nuestra rubia favorita tendrá que hacer frente de nuevo a su peor enemiga.
- Aria y Ezra ya han hecho pública su relación. Como es normal, en Montgomery's house no ha sentado nada bien, aunque mami-Piper se siente culpable porque su hija comenzó su relación con el profesor nada más volver de su año familiar alejados de Rosewood. Y su hermano Mike sigue yendo a un psiquiatra, aunque parece otro (con puñetazo a Ezra incluido).
- Em está compuesta y sin novia. Ni Samara (que la tenemos en Mystic Falls y queremos que se quede allí) ni Maya parecen seguir en su vida. Además, sus problemas con la úlcera han desaparecido y quiere volver al equipo de natación, aunque la entrenadora no está muy por la labor.
- Spencer está sola. Sus padres están en Filadelfia con su hermanísima Melissa, así que la menor de las Hastings debe aprovechar su ratito de calidad. Y Toby está empeñado en no dejarla de lado.
Con en este juego del "enfado fingido", mis zorrupias pretenden desenmascarar a "A" tendiéndole una trampa utilizando a Em como cebo. Y a pesar de que "A" mordió el anzuelo, las zorrupias han sido incapaces de aprovecharse de su ventaja. A ver, queridas mías: estáis en un sitio oscuro, cada una lleváis una linterna...¡¡pero no sóis capaces de apuntar a la cara de "A" para ponerle rostro!! Eso sí, para iluminar el móvil de "A" tirado en el suelo sí utilizáis las linternas. No me extraña que os esté costando tanto descubrir quién es "A" (que por su silueta y por todo lo ocurrido en verano, tiene que ser Garrett). Muy bien la escena a la salida de la piscina con las cuatro discutiendo, y a su alrededor todos los chicos implicados en la trama, para dejarnos claro que cualquiera puede ser "A"...vaya noticia.
Estas zorrupias nunca fallan y tenemos por delante diez capítulos para seguir disfrutando con ellas y su particular búsqueda de "A". Zorrupias, os doy un consejo: pasaos por los Hamptons y hablad con Emanda. Ella os enseñará a vengaros de "A". Eso sí, llevad un rotulador rojo: ¡¡indispensable!!