Creo que a todo el mundo le gusta la lasaña. A por ella.
De los platos precocinados, el más vendido es la lasaña. Será porque a mucha gente le encanta y también da un poco de pereza prepararla.
Si, además, no puedes tomar gluten o lácteos… hace años que no pruebas ese rico manjar italiano y ahora mismo estás salivando sólo con pensarlo.
Como eres lector habitual de este blog, ya tienes todas las herramientas necesarias para preparar en casa tu propia lasaña sin gluten y sin leche.
Pero todavía te contaré un truquito nuevo hoy…
Una de las cosas que más rabia me da, cuando me pongo con la lasaña es que se peguen entre si las láminas de pasta.
Las que son sin gluten son más caras y no está la cosa como para tirarlas ¿no?
Eso se ha acabado. Ni las vamos a cocer, ni las vamos a remojar.
O bien las compramos precocidas (si existen para nuestras alergias), o las tratamos como si fueran precocidas y listo. Voy a explicarlo.
1.- Si compras las placas de pasta precocidas, no necesitan cocción ni remojo. Se ponen secas al montar la lasaña y cogen la humedad de la bechamel y de la salsa boloñesa. Pero yo no sé si las hay sin gluten.
2.- Si las necesitas sin gluten, sin huevo, sin etc, etc y no las tienes precocidas, da igual: Montas la lasaña con más de 3 horas de antelación con las placas secas y ellas se irán hidratando con los jugos de la salsa boloñesa. Luego se cocerán en el horno. Se puede hacer incluso el día anterior.
Este ha sido el truco. Eso te simplifica bastante la elaboración del plato.
Sólo tienes que preparar una rica salsa boloñesa con suficiente tomate para que esté algo líquida, y una cremosa bechamel sin gluten.
Como se puede congelar, ya que nos pringamos, podemos hacer una cantidad generosa de lasaña sin gluten y sin leche, y guardar en el congelador unas cuantas raciones para otro día.
No me enrollo más. Va la receta:
- 2 veces la cantidad de salsa boloñesa indicada en mi receta
- 1 vez la cantidad de bechamel sin gluten y sin leche indicada en ESTA receta.
- Placas de pasta de lasaña (o canelones, da igual) aptas para tu alergia/intolerancia.
- Perejil u orégano para decorar al final.
- 2 cucharadas adicionales de tomate frito.
- Prepara la salsa boloñesa y la bechamel según las recetas que te he dejado arriba en la lista de los ingredientes.
- En una fuente apta para horno, pon el la base un poco de tomate frito
- Cubre de láminas de pasta de lasaña secas (sin cocer ni remojar) el fondo de la bandeja.
- Sobre ellas reparte una capa de salsa boloñesa.
- Sobre la salsa boloñesa, una capa fina de bechamel.
- Otra capa de placas de pasta de lasaña.
- Boloñesa
- Bechamel
- Y así sucesivamente mientras te quede material.
- Has de terminar con bechamel.
- Deja reposar más de 3 horas para que se hidrate la pasta de lasaña (salvo que sea precocida)
- Hornea a 200 grados durante media hora.
- Decora con orégano o perejil y sirve caliente.