Según en que sitio o casa de Castilla pidas o comas el lechazo; te le encontrarás de dos maneras. Os apunto las dos, que no tienen desperdicio y es para todos los gustos porque son igual de jugosas.
Ingredientes (TIEMPO APROXIMADO 1 1/2h , SEGÚN TAMAÑO):
- 1 cabeza de ajo.
- Perejil.
- Aceite de oliva.
- Vinagre de vino blanco.
- Sal.
- 1 (1/4) pata de lechazo (cordero lechal).
- Agua.
Elaboración: Ponemo a calentar el horno a 200º. Salamos la pata de lechazo y rociamos con un chorro de aceite, Bajamos el horno a 160º. Cortamos el perejil y troceamos el ajo. En un mortero ponemos el ajo y perejil y machacamos hasta que quede una pasta, echamos un vaso de agua y revolvemos y otro chorro de vinagre. Extendemos la mezcla un poco por encima, esperamos unos 20 minutos y damos la vuelta para que te tueste igual por los dos lados y hacemos la misma operación: rociamos con el resto de la mezcla. Volvemos a dar la vuelta y cinco minutos antes de servir, subimos el calor para tostar. Cuidando que no se seque ni queme, para que no se seque, podemos ir de vez en cuando rociando con un poco de agua que ira así soltando el jugo. TIPO CASTELLANO: - Aceite ( o manteca de cerdo). - Agua. - Sal. Elaboración: Igual que el anterior pero sin el ajo y perejil. Solo hay que vigilarlo e ir rociando con agua.