21 de Junio del 2013 | etiquetas: Terror, Festivales 2013
TwittearSi ayer nuestro colaborador Francesc Talavera nos descubría el palmarés del Nocturna Fantasy Film Festival, hoy nos habla de las mejores películas del uno de nuestros festivales favoritos.
1. “RESOLUTION”, NUEVAS SENDAS DEL HORROR
Una estimulante mezcla de elementos que reconceptualiza y abre nuevos caminos en el marco del horror. En su paso por distintos festivales ha cosechado un gran entusiasmo por su peculiar aproximación al género, hasta el punto de encumbrar a sus dos directores, los estadounidenses Justin Benson y Aaron Moorhead, como dos nombres a tener en cuenta dentro de la nueva hornada de jóvenes realizadores que empiezan a abrirse camino en el panorama del fantástico internacional.
¿De qué va?
Al recibir un vídeo que muestra su viejo amigo en una cabaña, armado y con una conducta errática bajo los efectos de la metanfetamina, un diseñador gráfico decide ir a ayudarlo a desengancharse, aunque sea por la fuerza. Mientras dura el proceso de desintoxicación de su amigo, el joven conoce peculiares personajes que moran por los alrededores del lugar, situado en una reserva india, a la vez que empieza a encontrar extrañas grabaciones de audio y de vídeo en distintos tipos de formato que parecen indicar que los observan muy de cerca.
¿Quién la hace?
Dos nuevos talentos, Justin Benson y Aaron Moorhead. Aparte de dirigir, producir y encargarse del montaje, el primero asume también la escritura del guión y el segundo la dirección de fotografía y los efectos visuales.
¿Quién sale?
Peter Cilellay Vinny Curran, secundados por Zahn McClarnon y el hiperactivo Bill Oberst Jr. en el papel de un enigmático arqueólogo francés. Los dos directores y el tercer productor se reservan una pequeña y divertida intervención como miembros de una secta religiosa que cree que el Mesías aterrizará en la Tierra con su nave espacial antes del fin de los tiempos.
¿Qué ofrece?
Una (por desgracia) atípica preocupación hacia la construcción de personajes y el cultivo de las relaciones entre ellos, junto a un interesante tratamiento del concepto del horror y a otros curiosos elementos narrativos que no conviene desvelar. Un estudio sociológico de los mecanismos de la amistad y una reflexión sincera sobre los motivos egoístas que conducen a alguien a querer ayudar a sus semejantes en un entorno social amenazante, endogámico e individualista. Una atmosfera enrarecida y progresivamente perturbadora que encuentra un espacio común en las fronteras de distintos géneros, espacio que aprovecha para dejar un poso que persiste largo tiempo después de su visionado. Una original propuesta con muchas más preguntas que respuestas y que requiere que el espectador se involucre como parte activa para completar los huecos. Y al fin y al cabo, un homenaje al arte de contar historias, con “su principio, su mitad y su final”. Su título juega con la polisemia, refiriéndose tanto a la determinación y al empeño del protagonista para conseguir que su amigo se desintoxique de su adicción como a la calidad de las grabaciones que va encontrando y que devienen parte fundamental de la trama.
2. “WITHER”, LOS ZOMBIS SUECOS TAMBIÉN MUERDEN
La gran vencedora de Nocturna 2013, con tres premios no exentos de polémica en el palmarés de su Sección Oficial, es una película de zombis sueca que mezcla comedia, terror y mucha sangre en una historia ya vista muchas veces pero no por ello insustancial.
¿De qué va?
Un grupo de jóvenes se dispone a pasar unos días en una cabaña abandonada en mitad del bosque sin saber que en el sótano se encuentra una criatura capaz de robar el alma y convertir en zombis hambrientos de carne a aquellos que la miren directamente a los ojos.
¿Quién la hace?
Dirigen y co escriben Sonny Laguna y Tommy Wiklund, quien también asume labores de productor en este segundo largometraje del tándem tras “Blood Runs Cold” en 2011.
¿Quién sale?
Patrik Almkvist, Lisa Henni, Patrick Saxe, Amanda Renberg, Johannes Brost y Jessica Blomkvist en el doble papel de la criatura y de su primera víctima.
¿Qué ofrece?
Un grupo de jóvenes con ganas de fiesta, una cabaña abandonada en mitad del bosque, zombis infecciosos que les arruinan el fin de semana... No, a priori no suena muy original, y aunque sea sueca, lejos está de Bergman o de los thrillers policíacos que se han puesto de moda impulsados por la popularidad de obras literarias como las de Stieg Larsson oHenning Mankell. En efecto, se trata de una reformulación de los patrones clásicos de este tipo de películas, que tras más de tres décadas aún beben de la sangre de la fundacional “Posesión infernal” de Sam Raimi. A pesar de ello, y aunque el tono se incline frecuentemente hacia la comedia (a veces voluntaria, otras veces quizá no) y algún intérprete sobreactúe incluso haciendo de zombi, eso no le impide tener ciertos ingredientes de notable interés. A destacar una hábil elipsis narrativa con la que el montaje retrasa la secuencia que cuenta lo que le ha pasado al personaje de Marie en su encuentro con la criatura subterránea. Un momento que genera un gran impacto y, sorprendentemente, lo hace sin recurrir a los aborrecibles golpes sonoros de susto fácil que imperan en tantas otras muestras de terror sin ingenio. Recreándose en el gore y con un diseño de maquillaje atractivo y conseguido, cuenta también con una estimulante vertiente trágica en la que los espectadores más sensibles pueden incluso sentir pena por la suerte de los personajes infectados, gracias en parte a los apuntes musicales al piano de la banda sonora de Samir El Alaoui. Además la historia inspira su criatura infernal, fuente detonadora de la trama, en el atractivo personaje mitológico de la Medusa, añadiéndole así una seductora plusvalía referencial en ningún caso desdeñable.
3. “STITCHES”, SEND IN THE CLOWN
La coulrofobia ha dado un buen número de películas de género para el recuerdo, pero este slasher, probablemente la película irlandesa más gore estrenada comercialmente en su país, se encarga de romper todos los moldes y de dar definitivos motivos de peso para padecerla. En vez de abusar de las técnicas digitales en postproducción, “Stitches” apuesta abiertamente por el uso del maquillaje y de los efectos especiales en rodaje, zambulléndose en un cruel festín sangriento rebosante de ácida comedia negra.
¿De qué va?
Un payaso desganado y sin vocación muere accidentalmente en la fiesta de cumpleaños de un niño que queda traumatizado. Seis años después, tras un ritual de resucitación llevado a cabo por otros miembros del gremio, el desdichado payaso vuelve de la tumba con la intención de vengarse de los niños, ahora adolescentes, que fueron involuntariamente responsables de su defunción.
¿Quién la hace?
Dirige y co escribe Conor McMahon, un irlandés obsesionado con Batman y especializado en el género que en 2004 rodó su primer largo, “Dead Meat”, una película de zombis afectados por una mutación de la enfermedad de las vacas locas.
¿Quién sale?
Los chicos, Tommy Knight, Gemma-Leah Devereux, Shane Murray Corcoran y Thommas Kane Byrnes. El payaso, el cómico británico Ross Noble, que borda su debut en el cine con este divertido y despiadado personaje a medio camino entre el monstruo de “It” y el Freddy Krueger más travieso.
¿Qué ofrece?
Un humor negro, ácido y gamberro lleno de mala leche, como sólo irlandeses y británicos consiguen concebir. Mucho gore sin remilgos. Originales asesinatos. Un sugerente tono de parodia de género sin perder la compostura. Un arrebatador perfume ochenteno. La presencia de Ross Noble. Todo muy políticamente incorrecto, aunque a pesar de sus transgresiones no se atreve a ir un poco más allá y prefiere esperar seis años a que los repelentes mocosos se hayan convertido en insoportables adolescentes para empezar a asesinarlos. Y es que claro, ¿quién puede matar a un niño? Matar adolescentes es mucho más divertido, y parece que éticamente es también más aceptable.
4. “I AM A GHOST”, EL OTRO LADO SOMOS NOSOTROS
Rodada en tan solo una semana con un equipo minúsculo y un presupuesto ínfimo, “I Am a Ghost” es una perfecta muestra de los nuevos caminos que la producción se ve obligada a tomar para sacar adelante proyectos cinematográficos en tiempos de austeridad económica. Entre sus trucos, repetir varias acciones hasta llegar a la hora y cuarto de metraje y hacer recaer el peso de la película por completo sobre su actriz, la debutante en el mundo del largo Anna Ishida, protagonista casi única de la función.
¿De qué va?
El fantasma de una mujer que ha quedado atrapado en una rutina repetitiva dentro de su propia casa intenta avanzar hacia su siguiente plano espiritual con la ayuda de una médium que ha conseguido contactar con él desde el mundo de los vivos.
¿Quién la hace?
Escribe, produce, dirige, lleva la cámara, se encarga de la fotografía, de los efectos especiales, de la mezcla de sonido y del montaje el polifacético H.P. Mendoza, un californiano de ascendencia filipina que ha rodado con absoluta libertad esta cinta, la segunda en su filmografía. En la presentación durante el festival, acompañado por la actriz protagonista, el director anunció que se encontraba a pocos días de iniciar, en la misma capital española, la filmación de su próxima película, un nuevo largometraje de horror titulado “The Dead People” que rodará en Madrid, Corea, Filipinas, Irlanda y su San Francisco natal.
¿Quién sale?
Anna Ishida, Anna Ishida y Anna Ishida.
¿Qué ofrece?
Una visión indie de los cuentos de fantasmas desde el punto de vista del fallecido. Una estética peculiar que empieza por el propio marco del encuadre, una ventana de bordes romos que, junto a la ambientación de estilo victoriano, ayudan a crear una atmosfera intemporal muy adecuada para su historia. Y aunque en su primera mitad se acerque peligrosamente al umbral del tedio, por su ritmo en ralentí y la repetición sistemática hasta la exasperación de una serie de acciones dentro del bucle cotidiano donde está atrapado este peculiar fantasma, la espera merece la pena porque en la parte final cuenta con alguna secuencia de gran impacto. Aparte de obtener el Premio del Público en Nocturna, “I Am a Ghost” ganó los Premios al Mejor Director y Actriz en Tucson y a la Mejor Película en el Bram Stoker International Film Festival del Reino Unido.
5. “INSENSIBLES”, LAS DOLENCIAS A TRAVÉS DE LOS TIEMPOS
¿Otra película española sobre la Guerra Civil? Pues sí, aunque no. En realidad, “Insensibles” cuenta una historia que abarca varias décadas, y aunque ese conflicto tan recurrente en nuestro cine haga acto de presencia por enésima vez, lo hace de forma tangencial, dejando que la historia se centre en aspectos bastante menos explorados.
¿De qué va?
Tras sufrir un accidente de coche en el que muere su mujer embarazada de seis meses, un neurocirujano descubre que padece un linfoma del que sólo puede salvarse con un trasplante de médula de uno de sus progenitores. Al averiguar que es adoptado, se ve obligado a emprender una investigación para encontrar a sus auténticos padres, acercándose así a una oscura historia que se remonta hasta los años 1930 con un grupo de niños insensibles al dolor físico.
¿Quién la hace?
Dirige Juan Carlos Medina, un cineasta hispano francés nacido en Miami que debuta en la dirección con este largometraje. Asimismo se encarga del guión, junto al donostiarra Luiso Berdejo, también colaborador en la escritura de la primera y la tercera “[•REC]” y director de la película “La otra hija”, protagonizada por Kevin Costner.
¿Quién sale?
En la época contemporánea, Àlex Brendemühl, Tómas Lemarquis, Juan Diego, Àngels Poch y Lluís Soler. En épocas pretéritas, Derek de Lint, Félix Gómez y Bea Segura.
¿Qué ofrece?
Dos historias paralelas en desajuste temporal que se acaban uniendo tras varias décadas. Una mezcla de géneros que festeja con el drama, la intriga detectivesca, el fantástico e incluso el terror, con una buena capacidad de creación atmosférica, desasosegante y de matices malsanos. Tras su paso por Sitges, ganar el Méliès de Plata en el Festival de Cine de Estrasburgo y recibir en Nocturna el Premio a la Mejor Banda Sonora Original, compuesta por el sueco Johan Söderqvist (autor también de la banda sonora de “Déjame entrar” y habitual en las películas de Susanne Bier), se estrenó finalmente en nuestras pantallas el pasado 14 de junio.
NOCTURNA SHOTS
El mundo del cortometraje tuvo un papel destacado en Nocturna. Con una pieza que servía de telonera delante de casi cada proyección, se vieron cortos de género por doquier que competían en las categorías Nacional e Internacional y con otro premio adjudicado por la votación del público asistente. Destacamos cinco de las piezas presentadas:
1. ATRAPADO
Una buena idea, dos actores solventes, tres minutos de duración y cuatro planos. La sencillez de este cortometraje con crítica social sobre la adicción a las nuevas tecnologías demuestra que con pocos elementos y mucha imaginación se puede crear una pequeña película capaz de ganar el Premio al Mejor Cortometraje Corto en el SENE Film, Music & Arts Festival de Rhode Island. Escriben, producen y dirigen Iván López y Rishi Daswani.
2. BOYS FROM COUNTY HELL
Tres hombres que trabajan poniendo cercas en una carretera de Belfast, dos de ellos padre e hijo con una tensa relación, se ven amenazados por una extraña criatura cuando la noche se les echa encima. Una historia de terror contada con sencillez y efectividad, con personajes bien dibujados, una ambientación muy lograda y un buen pulso narrativo. Además cuenta con un personaje muy cercano en espíritu y actitud al del abuelo que encarnaba Barnard Hughes en “Jóvenes ocultos”. Un cortometraje irlandés dirigido y co escrito por Chris Baugh y ganador de la pasada edición del festival de Kerry.
3. ALEXIS
Un niño con peligrosas habilidades telequinéticas, sospechoso de ser el responsable de la muerte de sus padres, está siendo sometido a un riguroso estudio científico en un búnker acorazado sin que los responsables del lugar hayan calibrado los límites de su enorme poder. Protagonizado por el actor scouser afincado en Madrid Jonathan David Mellor, presente en otras tres producciones presentadas en esta edición de Nocturna (los cortometrajes “In[B]etween” y “No mires ahí” y el largometraje “Al final todos mueren”), el cortometraje está dirigido, co escrito, producido y editado por Alberto Evangelio, y ofrece el angustioso advenimiento de una amenaza inminente y el taquicárdico enfrentamiento entre estudiosos y estudiado. Un cortometraje del que ya se está gestando la posibilidad de desarrollar en largo.
4. COLD TURKEY (EL CANÍBAL)
Con una propuesta que viene a ser una reconversión hacia el mundo del canibalismo de la figura del vampiro Louis, de la saga literaria de Anne Rice, cuenta la historia de un joven caníbal que quiere dejar de seguir asesinando para poder alimentarse. De forma angustiosa y bastante explícita, este cortometraje escrito, dirigido, producido, fotografiado y editado por el islandés Fannar Þór Arnarsson muestra el proceso de deterioro físico por desnutrición de su protagonista, lleno de remordimientos por sus asesinatos previos, y cuyo sistema digestivo ya no tolera ningún otro tipo de alimento que no sea carne humana.
5. AL OTRO LADO
Tras largos años de búsqueda, un investigador localiza un legendario espejo que conduce a otra dimensión y que está vinculado con una trágica historia del pasado. Protagonizado por actores destacados del cine español como William Miller, Ramón Barea o Carlos Álvarez-Nóvoa, está escrito, producido y dirigido por Alicia Albares. Al no recibir la subvención solicitada, la directora decidió invertir sus ahorros en la producción de este cortometraje de género fantástico con toques de romanticismo y aroma de cuento de corte clásico. “Al otro lado” ha sido ya galardonado con el Premio Especial del Jurado en Categoría Narrativa del festival californiano de Marin County, que se celebrará el próximo mes de julio.