Como había comentado anteriormente, luego de más de un año de haberlo recibido, estoy leyendo el ebook “7 pecados mortales del estilo” de Antonio Centeno, creador de “Real Men Real Style“, que trata de errores comunes que cometemos los hombres a la hora de vestir. A falta de tiempo no había podido avanzar mucho en la lectura ni por consiguiente seguir redactando al respecto, pero creo que es hora de continuar con el tema.
Si hay algo en lo que coincido con Antonio es en que el error más común que cometemos los hombres a la hora de vestir es no comprar ropa que entalle de forma correcta o comprar ropa de tallas que no son la nuestras, por alguna razón una gran parte de los hombres comete este error que en ningún escenario les hace lucir bien.
Es cierto que al comprar en una tienda la ropa no siempre te queda como debería, en mi caso por ejemplo, muy pocas marcas me quedan bien sin necesidad de recurrir a un sastre, usualmente las mangas de las camisas me quedan bien, pero tengo que mandar a entallar el cuerpo o el cuerpo me queda bien, pero las mangas me quedan muy cortas o muy grandes, en fin una variedad de situaciones.
Para quienes tienen este problema mi recomendación es llevar la ropa al sastre, señores hoy en día muchas tiendas tienen su propio sastre para reparar las piezas compradas ahí, no hay excusa para comprar ropa una o dos tallas más grande y usarla así o peor aún, usar ropa más pequeña, apretada e incómoda, como se ha vuelto común últimamente.
Que la ropa le entallara bien fue en algún momento un tema importante para los hombres, eventualmente su mentalidad fue cambiando y hemos presenciado cómo fue perdiendo importancia el tema hasta ver hoy en día cómo se ha perdido la costumbre de vestir bien, no sé si por pereza de buscar la talla correcta o simplemente por miedo al sastre, pero sean los motivos que sean, este es un error garrafal.
Algo que sin duda contribuye a que se cometa este error es el miedo que tienen muchos hombres a los vestidores, entendamos primero que nada que a la fecha no se conocen casos de vestidores que coman gente o que muerdan siquiera, eso de “yo conozco mi talla” no funciona, hay que probarse la ropa antes de llevarla, las tallas no son universales, esa camisa talla “M” puede resultar más pequeña que la que tienes en casa y entonces el trabajo será doble, porque te toca volver a la tienda para cambiarla, lo mejor es perder unos minutos para asegurarte de que todo está bien.
De igual manera, esa idea errada de que a la hora de comprar un saco, el mismo debe ser una o dos tallas más grande que la tuya es totalmente arcaica y ha tenido engañados a muchos por mucho tiempo, dejemos atrás esos mitos, es hora de que pasen a formar parte de un pasado oscuro. Un saco que te queda grande, no solo parece prestado, sino que te hace lucir pequeño y gordo, en cambio un saco de la talla correcta te hace lucir elegante y te da presencia.
Se dice que la ropa bien entallada resalta los mejores atributos de la persona y desvía la atención de aquellos detalles que no deseas que se noten y yo apoyo completamente esta teoría que es sin duda una teoría universal, no solo aplica para los hombres, sino también para las mujeres.
Originalmente estaba decidido a dar adicionalmente consejos para encontrar la ropa de la talla correcta en esta publicación, pero luego de redactar el post me di cuenta de que sería demasiado largo y terminé dividiéndolo en varias entradas que iré publicando a continuación de esta.