Los beneficios de una hidratación adecuada

¿Bebéis suficiente líquido a diario? ¿O quizá con el frío del invierno no os apetece beber nada porque el cuerpo no os lo “pide”?

Seamos honestos, no hay nada mejor que beber mucha agua, pero también es cierto, que no a todo el mundo le apetece beber agua a todas horas. Agua, caldo, té o infusiones, zumos o refrescos en cualquiera de sus variantes. En esos casos, quizá alguna de las anteriores opciones podrían ser válidas si no se abusa de ellos. Pero la cuestión es que se debe beber suficiente líquido a diario.

El organismo está formado principalmente por agua (en torno al 60 %), y no aportarle la cantidad suficiente de líquidos, puede provocar una serie de malestares, indicándonos con ello que el líquido que les estamos suministrando a nuestro organismo no es suficiente.

Dolor de cabeza, fatiga, cambios de humor, calambres o dolores musculares, pueden ser algunos de los síntomas provocados por leves estados de deshidratación.

Ya sea por falta de sed, por descuido, simplemente por pereza, bastante gente bebe poco durante la jornada. El cuerpo debe hidratarse debidamente durante todo el día, y en todas las estaciones del año (El agua no es solo para el verano). Necesitamos beber la suficiente líquido a diario. ¿Cuántos de vosotros lo hacéis?

Los expertos recomiendan consumir aproximadamente 2-2,5 litros de líquido al día, proviniendo un 20-25% de los alimentos y un 75-80% de las bebidas.

Beber la cantidad suficiente de líquido a diario nos reporta una serie de beneficios:

Ayuda a eliminar toxinas.

Tiene un gran poder saciante.

Es un excelente diurético.

Eficaz contra el estreñimiento.

Ayuda a hidratar la piel, evitando que se ésta se arrugue.

Mejora el rendimiento físico y psiquico.

Un estudio realizado por la Prof. Dra. Ana Adan, de la Universidad de Barcelona, analiza cómo la falta de reposición de líquidos afecta a diversas actividades intelectuales, destacando de manera especial las de atención, las psicomotoras (relación cuerpo-mente) y las de memoria inmediata o memoria a corto plazo.

También es imprescindible tomar líquido antes y después de alguna actividad o ejercicio físico para evitar, por ejemplo los calambres. El agua lubrica mejor las articulaciones y mejora la resistencia de músculos y ligamentos y contribuye a mantener los músculos tonificados. Una opción para los que no les apetece de ninguna manera beber agua, pueden ser las bebidas hidratantes para deportistas, ya que están compuestas por una mezcla de agua, sales minerales, y algunas veces con carbohidratos (azúcar), ayudando a reponer las pérdidas de líquido y electrolitos ocurridos por la sudoración durante el esfuerzo físico intenso.

La cuestión es que no se os olvide beber!! ¿Y vosotros? ¿Tomáis suficiente líquido a diario? ¿Soléis beber agua, refrescos o infusiones? Estaré encantada de leer vuestros comentarios!!!!

Besos desde mi blog!!!!

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