Los días que nos separan, de Laia Soler

Título: Los días que nos separan.
Autora: Laia Soler.
Editorial: Plataforma Neo.
Páginas: 413
Edición: Tapa blanda con solapas.
Nota: 10/10
Sinopsis: Abril está obsesionada con sus sueños. Desde que se cruzó con ese desconocido en la biblioteca, él se le aparece cada vez que se queda dormida. En su mundo onírico, el chico es Víctor, un burgués de la Barcelona de 1914, y ella… Ella ni siquiera es ella misma, sino Marina, una obrera que vive en el mismo edificio que Víctor.
Mientras la historia de los dos jóvenes del pasado avanza noche tras noche, Abril lucha por mantenerse al margen de las emociones de Marina e intenta descubrir qué significan esos sueños.
Según Francesc Miralles, «Los días que nos separan es un sorprendente debut, tanto debido a la juventud de la autora como a la elaborada magia que emana de la novela»
Opinión personal (sin spoilers):
Hay libros que a medida que lees, te llegan al corazón y quedan guardados para siempre dentro de él. Otros, a parte del corazón, consiguen tocarte el alma y quedarse marcados a fuego en ella. Los días que nos separan forma parte de este último grupo. Una novela preciosa, encantadora y que os va a enamorar, porque es imposible que la historia de Marina y Víctor no os quede grabada a fuego en el alma. Pero bueno, empecemos la reseña. La trama es especial, única, increíble y impresionante. No tengo ni una mala palabra para la trama ni para nada de la novela en general. Tiene una historia perfecta con un romance tierno, sencillo y encantador, que a la vez es un romance en condiciones, que va surgiendo poco a poco y sin prisa y por el que se lucha contra viento y marea. Aquí no tenemos amor 24 horas, tenemos un amor surgido a base de conflictos, algunos prejuicios y con el que, con el tiempo y junto a Marina, aprenderemos a querer a Víctor. A la vez, es una historia que transmite mucha calidez y cercanía a medida que vas leyendo y te sumerges tanto en la historia que cerrar el libro y volver al presente y casi como un sufrimiento, casi lo pasas tan mal como Abril cuando vuelve a la realidad. La trama engancha mucho, aunque a medida que vas leyendo es la típica trama por la que te mueres por saber el final pero a la vez es una historia que no quieres terminar nunca, por lo bonita y sencilla que es y lo mucho que llega a buscar. El ritmo es ideal. La novela tiene saltos en el tiempo pero están perfectamente metidos en la trama. No es una historia forzada, ni cuesta mucho ver el enlace de ambas historias porque Laia lo une todo desde el principio de manera perfecta. No es aburrida ni en una sola página, al contrario, para mi fue una novela que empecé y casi no pude soltar hasta terminarla. Y me dolió terminarla porque es tan bonita que habría leído más y más y más y no me habría cansado. Nos encontramos con unos personajes que no pueden ser más perfectos. La caracterización es sublime, los sentimientos traspasan el papel hasta el punto de sufrir, reir o llorar con la novela y la relación que surge es una de las más bonitas que he leído en cuanto a literatura juvenil. Yo también me enamoré de Víctor poco a poco junto a Marina, yo también quería saber que significaban los sueños como Abril y otro personaje que también me encantó fue Héctor. Bueno, en realidad creo que no hubo ningún personaje que no me gustara, porque incluso los malos son especiales a su manera. La caracterización y descripción de cada uno de ellos es tan perfecta que es casi palpable y eso me encanta. La ambientación es maravillosa. Una de las cosas que más miedo me daban debido a los saltos del tiempo es que la ambientación del pasado pudiera fallar. Pero no, incluso eso es perfecto. Laia salta del presente al pasado con una habilidad formidable, y además se nota a medida que leemos el gran trabajo de documentación que ha hecho la autora con esta novela. Como os he dicho antes es todo tan real, con tantos detalles, tan minucioso que nuestra imaginación disfruta con cada uno de los escenarios al igual que con cada una de las escenas. Y el final, es perfecto. Bueno, para qué mentir, la novela entera es perfecta. Entera, de la página 1 a la página 413. Me ha encantado y desde aquí le deseo muchísima suerte a Laia en su carrera porque se la merece y esperemos poder leer algo más suyo en un futuro no muy lejano ;) 
Una novela única que se puede definir en una palabra muy sencilla: inolvidable. Una historia de amor tierna, con un amor construido de manera increíble, una ambientación genial y una historia que os hará reír, llorar y no querer terminar el libro nunca. Es sencillamente perfecta. Sin duda pasa a ser de mis novelas favoritas. ~Agradecimientos a Plataforma Neo~