Un año más, y ya van veintiuno, el grupo EDEBÉ ha fallado sus premios de Literatura Infantil y Juvenil, y desde El Tiramilla venimos a contároslo para que no os perdáis ni un detalle sobre Tesa, la obra ganadora de los 30.000 euros a los que da derecho la modalidad juvenil. Con este título su autora, Pilar Molina, consigue una vez más alzarse con un galardón de reconocido prestigio, que se suma a un Barco de Vapor, dos premios Doncel, otro otorgado por la American Library Association, así como varias menciones en la Lista de Honor del CCEI. En su amplia trayectoria literaria, Molina ha publicado un buen número de obras tanto infantiles como juveniles, entre ellas algunas tan conocidas como El aprendiz, El largo verano de Eugenia Mestre o La sombra de la daga.
Su manuscrito ha sido elegido de entre los casi doscientos que participaban dentro de la categoría juvenil, que se corresponde con lectores mayores de trece años, tal y como especifican las bases. Sobre Tesa el jurado ha destacado el cuidado uso del lenguaje por parte de la veterana escritora madrileña y, sobre todo, su gran habilidad para trazar la atmósfera de fantasía y suspense que recorre toda la novela. En ella nos encontraremos con una joven quinceañera que se topa con la existencia de varios mundos paralelos cuando se traslada a un antiguo piso familiar. El lugar de la acción es fundamental para la autora, pues afirma que las mayores aventuras pueden ocurrir incluso entre las cuatro paredes de tu casa.
Han sido muchos los autores galardonados por Edebé a lo largo de sus más de veinte ediciones, desde que en 1993 se concediera por primera vez a un principiante Carlos Ruiz Zafón por El príncipe de la niebla. El más laureado sin duda ha sido César Mallorquí, quien ha recibido este premio en cuatro ocasiones (1997, 1999, 2002 y 2012), seguido de las dos victorias de Elia Barceló (1998, 2007); pero también destacan algunos casos curiosos en los que un mismo autor ha conseguido el premio en categoría infantil y juvenil, si bien en diferentes ediciones, como Agustín Fernández Paz (2005, 1994) y Jordi Sierra i Fabra (1994, 2006). El resto de ganadores, a quienes no podemos dejar de mencionar, fueron Joan Manuel Gisbert (1995), Carmen Gómez Ojea (1996), Milio Rodríguez Cueto (2000), Pascual Alapont (2001), Care Santos (2003), Pau Joan Hernández (2004), Andreu Martín (2005), Juan Madrid (2008), Jordi Cervera (2009), Maite Carranza (2010) y Susana Vallejo (2011).
Nos despedimos con la sinopsis de Tesa, que llegará en marzo a las librerías.
No soy miedosa y no era miedo lo que me daba aquel enorme piso, de más de cien años, que añoraba sus grandezas muy cerquita de la plaza de Oriente. Me daba respeto, aburrimiento y rabia; rabia porque me sentía engañada… En mis últimos insomnios había observado que a partir de las tres de la madrugada se despertaban los crujidos, los roces y los chasquidos… De pronto, un relámpago sordo iluminó por un momento la habitación y dibujó, a contraluz, una pequeña figura a los pies de mi cama. El corazón me dio un salto, mi mente se preguntaba si lo había visto o lo había imaginado. Si era una ensoñación de mi cansado duermevela o, realmente, había alguien al pie de mi cama. Alargué la mano bajo la almohada, con cuidado para no mover la colcha, y presioné la pera de madera que encendía la lámpara del techo. ¡Allí estaba! Fue sólo un segundo, porque de alguna manera, desapareció; pero tuve tiempo de ver sus ojos rojizos fijos en mí con asombro y la silueta de una cabeza achatada, en la que se dibujaban unas orejas puntiagudas.