La lubina, también conocida con el nombre de róbalo, es uno de los pescados más apreciados por su valor culinario y
su fino sabor. La forma más habitual de encontrar este pescado es
fresco y en una pieza, si bien su carne firme y sus pocas espinas hacen
que sea fácil prepararla en filetes o en lomos. A la hora de comprar una lubina y saber que es fresca, tendremos en
cuenta que su carne tiene que estar firme, las escamas bien adheridas a
la piel y los ojos brillantes y saltones. Además, el color plateado del vientre será más intenso y brillante cuanto más fresca sea.
De tod@s son conocidas sus innumerables posibilidades culinarias ya que
al tratarse de un pescado de carne compacta se puede preparar al horno, a
la brasa, a la parrilla, al vapor, en papillote...etc.
Hoy os la traigo al horno con patatas, es como más nos gusta en casa y creo que es una de las formas más sencillas de cocinar el pescado. Para
algunos pescados, desde luego la mejor.
Ingredientes:
- 1 o 2 lubinas (sin son pequeñas).
- 4 patatas medianas.
- 2 cebollas medianas.
- 2 dientes de ajo.
- 1 vaso de Albariño.
- Sal.
- Aceite de Oliva.
- Limones.
- Perejil.
Preparación:
- Comenzamos precalentando el horno a 200º y cortando las cebollas en aros.
- Pelamos y cortamos después las patatas en rodajas no muy gruesas y las semi freímos en una sartén. Lo justo para ablandarlas un poquito, luego se acabarán de hacer del todo en el horno con la lubina.
- Según se vayan haciendo, las iremos colocando en una fuente con papel absorvente para que pierdan exceso de grasa.
- Vertemos un chorrito de aceite en la fuente del horno y las colocamos a modo de cama. Encima de ellas la cebolla en aros, el ajo y perejil picaditos.
- Salaremos las lubinas por dentro y por fuera, estarán completamente limpias de escamas, tripas y vísceras..
- Les haremos un corte en la parte superior del lomo e introduciremos media rodaja de limón.
- Colocamos el pescado sobre las patatas, y rocíamos con el Albariño y un chorrito de aceite por encima.
- Introducimos en el horno y lo dejamos aproximadamente unos 20 - 25 minutos.
- Como no todos los hornos son iguales, sabremos cuando está hecho el pescado en el momento en el que toda su carne esté opaca y se desprenda fácilmente de
la espina. La mejor forma de comprobar si está en su punto es
pinchándolo con una brocheta fina por la parte más gruesa. Si el pescado
está listo, la
aguja entra y sale sin la menor resistencia. Es conveniente hacer
esta prueba antes del tiempo aconsejado para el final de la cocción. Un
pescado poco hecho puede introducirse de nuevo en el horno, pero el
exceso de cocción no tiene remedio.