Los macarrones son de ese tipo de platos que saben a todo el mundo. Además es un tipo de pasta que, por su forma, se presta a infinidad de variantes y combinaciones.
Hoy los vamos a traer aquí con calabaza, ya que está de temporada y hay que aprovecharlo.
Normalmente es muy aconsejable incluir verduras y hortalizas en nuestra dieta.
En el caso de la calabaza hay que decir que es muy baja en calorías, unas 25 Kcal por cada 100 g. de peso, además de contener gran cantidad de agua y ser muy rica en fibra.
Así mismo es muy rica en vitaminas A, C y E, así como en antioxidantes, vamos….que ya estás tardando en preparar algo con esta hortaliza que nos regala la madre tierra.
Macarrones con calabaza al horno
- Dificultad: Fácil
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Tipo de receta: Horneado
Tiempo empleado:
- Preparación: 35 min.
- Horneado: 25 min.
- Tiempo total: 60 min.
Porciones: 6
Información nutricional por cada porción:
- Calorías: 313
- Grasas: 11,4 g
- Carbohidratos: 40,8 g
- Proteína: 13,5 g
INGREDIENTES:
- 300 g. de macarrones integrales
- 1 kg. de pulpa de calabaza
- 200 ml. de nata líquida
- 2 huevos M-L
- 4 cucharadas de leche
- 2 hojas de laurel
- 70 g. de queso rallado Emmental
- Sal
PASOS:
- Cortamos una calabaza en rodajas.
- Le sacamos la corteza exterior y las pepitas interiores.
- La troceamos en partes menudas.
- La cubrimos de agua en una cazuela con 2 hojas de laurel.
- Añadimos una pizca de sal y cuando empiece a hervir mantenemos ahí 20-25 min.
- Calentamos abundante agua para 300 g. de macarrones.
- Cuando hierva añadimos una pizca de sal y los cocemos
- 10 minutos si son integrales, 7 si son normales.
- Escurrimos la calabaza.
- La pasamos a un bol y hacemos un puré con la batidora.
- Añadimos 200 ml. de nata líquida para cocinar.
- También 50 g. de queso rallado y batimos bien.
- Escurrimos los macarrones y, sin pasar por agua, los añadimos a la crema.
- Engrasamos un molde para hornear con mantequilla.
- Echamos dentro la crema de macarrones y calabaza.
- Distribuimos bien por todo el molde.
- Esparcimos por encima 20 g. de queso rallado.
- Batimos 2 huevos con 4 cucharadas de leche y rociamos por encima.
- En horno precalentado a 250 C hornearemos por 25-30 minutos.
- Sacamos cuando veamos que se va dorando la superficie.
- Dejamos enfriar un poco y sacamos las porciones a un plato.
Bien, vamos allá con el paso a paso fotográfico:
Vamos a empezar pelando la calabaza. En este caso yo empleo una de 2 kg. de la que nos quedará 1,5 kg, más o menos, aunque en la receta voy a emplear 1 kg. solamente. Para ello la cortamos en rodajas no muy anchas.
Hay varias formas de pelarlas. Lo podemos hacer con un cuchillo bien afilado dando cortes verticales pero, para mí, la forma más práctica es hacerlo con un pelador de zanahorias. Lo vamos pasando por todo su contorno a medida que la vamos girando y nos saldrá una fina capa, desperdiciando lo mínimo.
Ya vemos como nos queda tras darle una pasada alrededor.
Si es necesario la podemos retocar para acabar de eliminar las partes blancas de la superficie.
Para eliminar la parte interior de las pepitas es bueno cortarla en trozos pequeños y luego, con una puntilla o cuchillo mondador, eliminar esa parte interior.
Luego la cortamos en trozos no muy grandes, que faciliten la cocción.
En mi caso voy a emplear 1 kg, que cubrimos de agua en una cazuela, junto con 2 hojas de laurel y un poco de sal.
Lo mantenemos a fuego máximo y cuando empiece a hervir lo tendremos así por unos 20-25 minutos. Dependerá de lo grandes que fuesen los pedazos de calabaza. El punto de cocción es algo que se verá pasado ese tiempo.
Mientras tanto, ponemos a hervir una cazuela con suficiente agua para unos 300 g. de macarrones. Como son integrales les llevará un poco más que a los normales, unos 10 minutos, más los 10 minutos que tarda en empezar a hervir, nos llevará, más o menos, lo mismo que a la calabaza hacerse.
Cuando la calabaza vaya, tras unos 25 minutos en mi caso, la escurriremos bien.
Luego ya la pasamos a un bol en la que la vamos a trabajar.
La pasamos por la batidora hasta hacer como un puré. También podría valer aplastarla con un tenedor mismamente, ya que está muy blanda al estar bien cocida.
También escurrimos los macarrones tras unos 10 minutos de cocción. Recordad que estos son integrales. Si usáis de los normales, con 7 minutos llegará.
Batimos bien la calabaza, hasta hacer un puré, que no queden trozos sueltos.
Le añadimos un brick de 200 ml. de nata líquida para cocinar, con menos grasa que la de montar.
LO batimos un poco integrando la nata. Añadimos 50 g. de queso rallado, Emmental en mi caso, y volvemos a batir otro poco.
Si los macarrones se nos quedaron un poco pegados entre sí, los separamos antes de incorporarlos a la crema de calabaza. No los paséis por agua, ya que perderían la película superficial que hace que absorban más crema.
Mezclamos los macarrones con la crema de calabaza.
Damos unas vueltas para que nos quede todo muy integrado.
Vamos a engrasar un molde especial para horno, en mi caso rectangular de 30×23 cm.
Nos queda todo engrasado con la mantequilla.
Colocamos dentro la crema de calabaza con los macarrones.
Lo distribuimos bien por toda la superficie.
Vamos echar por encima un poco de huevo, leche y queso rallado. Dependiendo del tamaño de vuestro molde, o de si se vos cuela más huevo batido hacia el fondo o no, podréis necesitar batir un huevo o dos. En mi caso batí los dos, pero podéis probar si os llega con uno solo.
En mi caso batí 2 huevos con 4 cucharadas de leche.
Primero esparcimos por encima unos 20 g. de queso rallado Emmental, o del tipo que más os guste, pero este va bien ya que no tiene un sabor demasiado fuerte para combinar con la calabaza.
Vamos añadiendo por encima el huevo batido. Si no queréis que se os caiga a borbotones y mucha cantidad en unos sitios y poca en otros, podéis añadirlo con una cuchara grande.
Y sino, directamente desde el cuenco donde se batió.
Ya nos queda todo distribuido por la superficie. Lo vamos a llevar al horno precalentado a 250 C
Lo tendremos en el horno con calor arriba y abajo por unos 25-30 minutos, eso va a depender mucho de cada horno, ppero estaremos atentos a ver cuando se va dorando por su superficie para sacarlo.
Lo dejamos enfriar un poco antes de desmoldearlo. Este es un plato que puede tomarse tanto caliente como frío.
Esperamos un poco y ya podremos sacar nuestras porciones sin que se deshagan.
Bueno, pues esto era todo. ¿Y vosotros, cómo preparáis la calabaza?, seguro que tenéis alguna forma bien curiosa de hacerlo.
Espero que os guste esta forma.
Buen provecho internautas, nos vemos en la próxima receta.
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