Todo el mes de enero sin hornear dulces. Así dije que lo haría para quitarme los excesos navideños y así lo he hecho. Y ya por fin el otro día hice estas magdalenas algo diferentes en color y en sabor. Y es que a quién le parezcan de chocolate está equivocado.
La harina de algarroba se utiliza como sustituto del chocolate para quién no lo puede tomar. No es nuestro caso pero nos encanta el sabor que aporta a las magdalenas y bizcochos. Si no la habéis comprado nunca os animo a que probéis porque da un sabor que sorprende, muy suave y que además hace los dulces muy digestivos y sientan muy bien, nada pesados. la harina de algarroba se puede conseguir en herbolarios y tiendas de productos ecológicos y dietética.
*La masa está elaborada en amasadora pero sin problemas se puede elaborar a mano.
*Se conservan perfectamente unos cuantos días super tiernas.
*Con estas cantidades han salido 16 unidades.
INGREDIENTES
-4 huevos
-160g. de azúcar
-130g. de aceite fino
-el zumo de una naranja
-170g. de harina corriente
-50g. de harina de algarroba
-una pizca de sal
-un sobre de levadura química
PREPARACIÓN
En el cuenco de la amasadora ponemos los huevos y el azúcar. Batimos enérgicamente a velocidad rápida unos cinco minutos hasta que espumen y doblen su volumen.
Bajamos la velocidad, y a velocidad lenta y sin dejar de batir vamos echando el aceite y el zumo de naranja. En un cuenco mezclamos la harina, la levadura y la pizca de sal. Lo tamizamos y lo vamos incorporando a la masa poco a poco a cucharadas. Ahora y sin dejar de batir vamos poniendo la harina de algarroba a cucharadas. Dejamos amasar despacio hasta que esté todo bien integrado.
Tapamos con film transparente y dejamos la masa reposar en la nevera mínimo una hora.
Al cabo de este tiempo encendemos el horno con función aire a 210º. Sacamos la masa de la nevera y preparamos unos moldes rígidos donde colocaremos las cápsulas de papel para magdalenas. Las llenamos con ayuda de dos cucharas soperas y las llenamos un poco más de la mitad.
Cuando el horno haya alcanzado la temperatura la bajamos a 180º y metemos las magdalenas. Dejamos hornear unos quince minutos.
Sacamos la bandeja y rápidamente preparamos las que nos quedan. Horneamos de nuevo.