En esta ocasión vamos a preparar una magdalena que combina la masa de siempre con otro con chocolate, que no sólo le dará una apariencia bonita sino que le va a aportar un toque de chocolate.
INGREDIENTES (para 12 magdalenas):- 3 huevos- 200 grs. de harina- 125 grs. de azúcar- 100 ml. de aceite de girasol u oliva suave- 75 ml. de leche- 1 sobre de levadura Royal®- 20 grs. de cacao puroPREPARACIÓN (en Thermomix):Ponemos el azúcar y los huevos y programamos 3 minutos a 37 ºC a velocidad 3. Pasado ese tiempo volvemos a programar 3 minutos a velocidad 3 sin temperatura.Añadimos el aceite y la leche y mezclamos durante 10 segundos a velocidad 6.Por último incorporamos la harina y la levadura durante 30 segundos hasta que se integre.Ahora volcamos la mitad de la masa en un bol y reservamos.Al resto de la masa le añadimos el cacao puro y mezclamos durante 15 segundos a velocidad 6.Volcamos en un bol y reservamos.PREPARACIÓN (Clásica):Batimos los huevos con el azúcar con unas varillas eléctricas hasta conseguir una masa esponjosa.Añadimos la leche y el aceite y mezclamos. Incorporamos la harina y la levadura hasta que tengamos una mezcla homogénea.Volcamos la mitad de la masa en un bol y reservamos.Al resto de la masa le añadimos el cacao puro y mezclamos con las varillas.Volcamos en un bol y reservamos.******Precalentamos el horno a 200ºC.Colocamos los moldes de acero y dentro de éstos los moldes de papel. Rellenamos la mitad con masa blanca y la otra mitad con la masa de chocolate. Repetimos el proceso con todas.Con la ayuda de un palillo mezclamos ambas masas para conseguir ese efecto marmolado.Horneamos a 200º C durante 18 minutos. Tened en cuenta que cada horno es un mundo por lo que debéis vigilarlas hasta que se empiecen a dorar.Dejamos enfriar y ya tenemos unas magníficas magdalenas caseras para el desayuno...... y mucho más sanas que la bollería comprada.¿Os animáis a probar?Revista Cocina
Me encantan las magdalenas caseras, quedan muy esponjosas con el sabor a magdalena de siempre y con un olor en la cocina que dan ganas de no dejar ni las migas.