En diversas ocasiones he leído que diversas publicaciones han copiado los contenidos y fotos de los blogs, las han manipulado (quitando todo aquello que muestra que no les pertenece), las han publicado como propias y cuando se les ha llamado la atención, han restado importancia al hecho o ni siquiera han contestado.
La semana pasada volvió a sucederle a Susana de Webos fritos [webosfritos.es], un blog bien conocido por todos, donde un periódico copió varias de sus recetas, para luego restarle importancia argumentando que la becaria lo había hecho, vamos la respuesta más infantil que se puede dar, culpar a otro de lo que es uno responsable.
El año pasado yo mismo publiqué un artículo titulado “No me copies sin avisarme …” donde manifesté claramente mi postura “porque yo no tengo ningún inconveniente en que te copies y publiques parte de los contenidos de mi bog, siempre y cuando indiques de donde lo has hecho e incluyas el link correspondiente, ya que bastante trabajo me cuesta a mi elaborarlos, como para que luego otro se aproveche y encima gane dinero con ello“.
Pero, por favor, menuda falta de respeto es esta, con el trabajo que cuesta cada vez que publicamos una receta, que si no lo sabes hay que documentarse, comprar los ingredientes (y muchas veces no están en el supermercado de la esquina), preparar la receta (a veces más de una vez hasta que salga perfecta), hacer las fotos, escribir el post; vamos que no es algo que se haga en cinco minutos, sino más bien es un trabajo de horas.
Y digo yo, ¿es que los periodistas (por darles un nombre) de los blogs, webs, periódicos o revistas especializadas, hacen todo el trabajo de forma gratuita y altruista? Porque siempre veo que tienen bastante publicidad con los contenidos y el objetivo de su publicación es “ganar dinero”.
Hace una año más o menos, tuve una conversación con el editor jefe de una revista gastronómica, donde el tema surgió porque se quejaba que una bloguera le había pedido explicaciones por una receta que habían publicado (sin su permiso). El tema caldeó el ambiente hasta que hubo que zanjarlo para no estropear el evento, pero sus argumentos son similares a muchos que copian sin reparo el trabajo ajeno para lucrarse:
Para empezar me decía que los blogueros no son profesionales, sino más bien gente aburrida que por tener su minuto de gloria se ponían a escribir sin más. Por un lado le doy la razón, los blogueros no somos periodistas profesionales, no somos fotógrafos profesionales, o no somos cocineros profesionales. Los blogueros/as somos personas que tenemos como afición la cocina y que con los recursos que disponemos nos dedicamos a compartir el conocimiento que tenemos, pero es un esfuerzo que nosotros hacemos para nuestro blog, y a lo que nos dediquemos profesionalmente es cosa nuestra.
Los blogueros son los primeros que copian las fotos y las recetas de otros. Una idea general pero errónea, ya que muchos nos dedicamos a cocinar, aunque muchas recetas sean de otros, también creamos nuestras propias recetas y hacemos nuestras propias fotos y artículos y si leyeran un poco podrían darse cuenta de ello, pero precisamente somos los primeros que incluimos en la descripción donde nos hemos basado para la receta, ya que es enriquece y precisamente nosotros si que lo valoramos.
En Internet todo el mundo coge fotos gratuitamente de todos. Por favor, si la imagen tiene marca de agua, es que alguien ha hecho la foto y ha insertado su sello para que los demás sepan quien lo hizo, no venga con una idea tan infantil si luego coge la foto y la recorta para que se vea la marca de agua, para luego apropiarse de la autoría de la foto.
Hay miles de recetas en Internet y todas son iguales. Tiene razón, hay miles o millones, pero muchas son únicas, dado que tienen algún ingrediente o están preparadas de otra forma, pero sobre todo si esa receta tiene algo así como “elaboración propia”, ¿no da que pensar que aunque está basada en otra receta se ha preparado de forma personal? Pero sobre todo, aunque la receta sea de un cocinero profesional de renombre internacional, la receta que uno ha preparado es con el esfuerzo personal.
Si un medio de difusión publica una receta, la autora debería sentirse orgullosa en vez de quejarse. Claro que se siente orgullosa de haber sido escogida como bloguera, orgullosa porque es una receta suya, orgullosa de haber sido seleccionada entre miles de recetas, orgullosa de ver su receta en un medio de comunicación, pero sobre todo furiosa por haber sido víctima de un robo en toda regla. Pero ¿qué cuesta escribir a la autora antes de publicar la receta? Yo personalmente no pongo ningún inconveniente cuando me lo han pedido, pero siempre que pongan quien es el autor, un link, un comentario, o algo, y así seré el primero en sentirme orgulloso y compartir mi alegría para que la gente que conozco sepa que mi receta ha sido publicada y que vayan a leerlo.
Los blogueros también ganan dinero con las recetas. Será así o no será así, lo que haga cada uno con su blog es decisión personal, pero será lo que hace con sus contenidos y no a costa de los contenidos de los demás, o ¿aquí se aplica lo de “quien roba a un ladrón, cien años de perdón”?.
Finalmente, un compañero del editor jefe, me comentó que la situación con la bloguera se había solucionado, pidiéndola disculpas en un e-mail donde le decían que al ser un medio escrito no podían rectificar el nombre de la autora en la receta, pero que para quedarse tranquila, le habían aconsejado que se suscribiera a la revista y así podía comprobar que no se incluiría ninguna receta más de ella en el futuro.
Como verás la conversación, contenía los argumentos más ridículos, pero a ver que hacen esos medios de comunicación cuando sufren la situación ellos mismos, pues lo primero su departamento jurídico se pone en contacto para avisar que hay que rectificar o eliminar la información y si no se puede hacer que hay que publicar una nota indicando lo sucedido, o por el contrario “iniciarán acciones legales”.
En fin que tal y como comentó un bloguero, es la eterna lucha entre David y Goliat, pero lo que ellos no se dan cuenta es que David tiene una honda (llamada blog y redes sociales) donde puede avisar de las malas acciones de Goliat y que si entre todos, vamos dando a conocer a los distintos Goliats y dejamos de leerles, al final se darán cuenta (por perder lectores e ingresos de publicidad) que es mejor ir de buenas.
Aquí tienes algunos ejemplos de diversos blogs que han sufrido esta situación:
En el blog de Webos fritos [webosfritos.es] un post escrito por Susana, titulado “Manifiesto contra los que roban fotos” [webosfritos.es/2012/09/manifiesto-contra-los-que-roban-fotos], un artículo muy interesante de la situación que ha sufrido en reiteradas ocasiones.
También Cova con su blog Comoju [comoju.blogspot.com.es], ya tuvo una situación similar y que publicó “Norte de Castilla censura comentarios y usa fotos sin permiso” [comoju.blogspot.com.es/2010/05/norte-de-castilla-censura-comentarios-y.html].
Uno de los blogs que suelo leer habitualmente, Pinchos y Canapés [pinchosycanapes.blogspot.com.es] donde Graci también sufrió el atropello de haber sido copiada y así lo comentó en su post “Vino dulce caseo, Plagios y Otros cosas de comer” [pinchosycanapes.blogspot.com.es/2012/02/vino-dulce-casero-plagios-y-otras-cosas.html].
Por otro lado Ana Fuentes de Comer y Cantar [www.comerycantarblog.com], ya denunció también en su blog con el artículo “Estafadores. Si tienes un blog es importante que leas esto y lo distribuyas” [www.comerycantarblog.com/2011/10/estafadores-si-tienes-un-blog-es.html], donde en esta ocasión había sufrido el robo de sus recetas para incluirlas en una aplicación para los móviles Android.
… unos claros ejemplos de algo que se está generalizando y que creo necesario parar lo antes posible. Por ello quiero dar a conocer el manifiesto escrito por Susana de Webos fritos [webosfritos.es], al que me sumo y que te copio con la autorización de la autora, ¡como debe ser!.
Manifiesto para todos los que roban fotos
1. Todas las recetas y fotos de webosfritos.es están publicadas bajo una licencia Creative Commons. Es muy sencillo: se puede usar nuestro material citando y no recortando.
2. Mi fotógrafo trabaja mucho y bien, regala su trabajo a todos nuestros lectores, por el puro placer de compartir. Pero no regala su trabajo para que a ti te solucione la papeleta en tu catálogo, en tu publicación o en tu web. ¡Buscate a alguien que lo haga y claro, aunque es muy molesto, paga por ello!
3. Compartir una buena receta lleva mucho tiempo de elaboración, pruebas y esfuerzo personal. ¿Pretendes copiar sin citar? No seas malote y haz las cosas bien.
4. Si estas buscando una foto en internet de un producto del que necesitas una imagen y te encuentras una buena foto, piensa que detrás hay un autor, incluso las fotos malas no nacen por generación espontánea.
5. Aún así has hecho un uso indebido de nuestro material pensando que cómo lo vamos a descubrir, si total es para un cartelito chiquitito en una tahona en Laponia… Pues sí, tenemos lectores en Laponia, que le vamos a hacer…
6. Te ruego si hablamos algún día por este tema no me digas que es un error del becario, del de la imprenta, o del que te ha montado la web. Insulta a mi inteligencia.
7. Así mismo te ruego, caso de que trabajes en un medio de comunicación, que no nos ofrezcas como compensación un enlace. No te mires el ombligo y piensa que a lo mejor nuestro blog tiene más lectores que tu publicación.
8. La Ley nos ampara en estos casos por muy tedioso que sea para nosotros iniciar un procedimiento judicial.¡ No nos vamos a cansar de denunciar! ¡No vamos a flaquear! ¡Basta ya de este tipo de actitudes! ¡Respeto al trabajo de los blogueros!
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