Mi propuesta para hoy es una infusión compuesta por estos tres ingredientes. manzanilla, regaliz y jengibre.
Es ideal para ser tomada a cualquier hora (hasta incluso antes de acostarse) para ayudar a facilitar el sueño, o bien para aliviar el dolor de estómago producido por situaciones estresantes (¿Nervios o nudo en el estómago?), y para mejorar las digestiones lentas (sobre todo ahora con las comilonas navideñas).
La manzanilla es una de las plantas con reconocidas virtudes para el sistema digestivo y nervioso. (Esto puede incluir gases, dispepsia, digestiones lentas, problemas intestinales, etcétera...)
El regaliz también tiene infusión tiene propiedades digestivas y además está indicado cuando se presentan problemas en las vías respiratorias.
Por otra parte, el jengibre es un antiinflamatorio natural que ayuda a combatir enfermedades respiratorias y problemas digestivos (incluyendo nauseas y mareos).
Los que tengáis la garganta irritada por el frío o las calefacciones, esta infusión os puede aliviar la irritación y el dolor:
Las cantidades por persona y taza son:
1/2 cucharadita de manzanilla (a poder ser en flor)
1/2 cucharadita de regaliz
Ralladura de jengibre fresco o una rodaja muy finita (de 2 mm aprox)
Preparación:Se pone a hervir agua (300 cc o un vaso y medio por persona). Se retira del fuego y se añade la manzanilla, el regaliz y un poco de ralladura de jengibre fresco (o una rodajita muy finita). Se tapa y se deja reposar durante cinco minutos. Se cuela la infusión, y se sirve en una taza sola o con un poco de azúcar de abedul.
¿Y vosotros? ¿Soléis tomar infusiones en invierno? ¿O tés? Estaré encantada de leer vuestros comentarios!!!
Besos desde mi blog!!! También podeís seguirme a través de Facebook