Mapa para entender al San Lorenzo de hoy

La acefalía es el resultado de este proceso histórico que vive San Lorenzo. Una dirigencia que, en menos de un año y medio, dilapidó su capital político en una triple alianza entre Abdo, Aldrey y Datria, un rejunte electoral que bregaba sólo por un triunfo en las urnas, existente a la postre, con una cantidad record de votos por parte del socio, que creyó las promesas vacías y abstractas que emanó Vamos San Lorenzo. A la primera de cambio, las grietas se hicieron visibles y las enemistades evidentes. Abdo recluido en su círculo íntimo, sin apoyo en la Comisión Directiva y esperando como única condición para irse que le documenten la plata que puso desde que llegó, una cifra que supera los 30 millones de pesos; Aldrey con apoyos esporádicos, mermados luego de la eclosión tras la frustrada contratación de Osmar Ferreyra y Datria que se borró, al igual que con Savino, ante disensos que se tornaron imposibles de solucionar. Un trinomio que se juntó para solamente ganar las elecciones, y ya sabemos bien cómo terminan estos experimentos.

Lo que empieza mal…

Entraron al poder con 110 millones de pesos de pasivo, hoy, 18 meses después, lo duplican. Un combo de ineficacia, dejadez, nula gestión y demasiado ego en cada una de las patas supuestamente ejecutivas. Nunca se llevaron las reformas financieras debidas para evitar el descalabro iniciado durante la gestión de Savino, alabado por Tinelli, pero uno de los responsables máximos del caos que incumbe a la entidad. Promover políticas para obtener mayores ingresos y ordenar, de una buena vez, las cuentas. Si ingresan 50 pesos por mes, no se puede gastar 150. Pensamiento de almacenero, dirán, pero coherente si se desea la operatividad de un club que no es sólo fútbol, que cuenta con otras actividades sociales que merecen un trato mejor. No hubo vocación ni voluntad para cambiar la ecuación. El NO de Tinelli fue el golpe de gracia al oficialismo, que preparaba una retirada silenciosa, vergonzante, sí, pero por lo bajo, sin hacer mucho ruido para que MT se hiciera cargo de este barco hundido, sin capitán ni solución aparente al mediano plazo. La frustrada conferencia de prensa de Aldrey, con escándalo incluido tras la irrupción de un asambleísta con génesis oficialista, la internación tras sufrir Abdo taquicardia y la salida prematura de Datria son instantáneas de lo que vive el club, una tierra arrasada, donde la imprevisión es la ley general.

¿Y Caruso?

Caruso Lombardi, cual refugiado en una embajada exótica pide a los gritos refuerzos, pide e implora pero no sabe a quién, vaya paradoja. Ayer Abdo fue a la práctica, habló sin hablar con Caruso. Según el director técnico, “es un pollito mojado”. Nada definido. Todos los equipos en plena pretemporada incorporando futbolistas, afilando la parte física para el Torneo Inicial que comenzará en un poquito más de tres semanas. San Lorenzo sigue con un turno en la Ciudad Deportiva.De aquellos nombres rimbombantes como Cavenaghi, Gonzalo Rodríguez, Alejandro Domínguez, Franco Jara y Denis Stracqualursi, solamente llegó un nombre bien terrenal como el de Matías Díaz, de último paso en Defensa y Justicia. Otro que vendría sería Leandro Díaz, volante mixto que supo jugar en el Huracán subcampeón de Cappa en 2009, al lado de Bolatti, y del gusto de Caruso ya que lo viene de dirigir en Quilmes. Además el entrenador está probando a varios jugadores, entre ellos, Augusto Álvarez, otro que se desempeñó en el ascenso con la camiseta de Desamparados.

El futuro

La dirigencia piensa en dar un paso al costado, algo que sólo hicieron el vicepresidente Roberto Ribas por el oficialismo y Ramiro Monner Sans, vocal por la oposición (+ San Lorenzo). Aldrey dijo renunciar pero su dimisión todavía no llegó a la sede de Avenida Mayo. El timón parece residir exclusivamente en Abdo, quien habló con Tinelli y le pidió especialmente colaboración para cerrar refuerzos antes de la próxima semana cuando, según lo establecido, por ahora y solo por ahora, vale aclarar, renunciará la Comisión Directiva y la Asamblea designará un gobierno de transición y un posible llamado a elecciones. Por ahora habría tres listas: una conformada por Matías Lammens –del entorno de Tinelli-, Marcelo Moretti, ex candidato a presidente en 2010 y Horacio Arreceygor, con pasado en la gestión de Savino; luego Cruzada por San Lorenzo, agrupación política dela Subcomisión del Hincha, liderada por Claudio De Simone y por último el partido de Fernando Miele, sin carnet e imposibilitado de pertenecer en la vida política del club y que pondría un candidato testimonial como lo fue Roberto Edi en los últimos comicios. En este desborde llamado San Lorenzo imposible resulta certificar esta información, apenas sería un bosquejo de lo que vendría. Lo ponemos en condicional, como todo lo que viene de Boedo.

El papel de Tinelli

Tinelli no es debutante en la vida política de San Lorenzo. Su papel en el Grupo Inversor, entre los cuales estaba Abdo y Gustavo Ranucci, que planificó el plantel durante el año 2008, especialmente enla CopaLibertadores, ha sido mirado de reojo por una cantidad de hinchas que vieron cómo, luego de las salidas de apellidos de peso que llegaron a Boedo (D`Alessandro, Bergessio, Solari, Placente, Barrientos), el club se quedó sin activos y con un plantel desmantelado, origen de las frustraciones del presente, con unas divisiones inferiores raquíticas, imposibles de nutrir en forma sustentable el recambio en la primera división. Jugadores que irrumpen y por su capacidad terminan desempeñándose en equipos de menores categorías.

Tinelli manifestó nuevamente sus ganas de colaborar económicamente con el club pero no así en la parte política, a la cual acusó de sucia y de dirigentes sin apoyo monetario propio que viven de negocios en el fútbol. Allegados al conductor televisivo aseguran que pondrá dinero en contrataciones, incluso que retomó las negociaciones que había iniciado una semana atrás. Tinelli además se hizo cargo del pago de $1.200.000 para levantar los sueldos de junio y evitar que el paro de empleados que se presentaba en el club pueda destrabarse. Lo controversial en los dichos de Tinelli es hablar de suciedad dirigencial en el club, habiéndose sido partícipe en otro proceso de la institución bajo el llamado Grupo Inversor. Amén de esto, él podría ser una llave sustancial, si tuviese voluntad, para iniciar esta “limpieza” que San Lorenzo tanto necesita. En la queja sobre lo político no yace una solución en sí misma sino al contrario llamando a mayor participación para cada uno de los socios. El rol de Tinelli todavía está por verse. Las elecciones serán la piedra angular sobre su proceder.

Aquí algunas líneas conceptuales para comprender, a grandes rasgos, la actualidad de este San Lorenzo, pálido, agrio, en una crisis que parece nunca terminar. Quién es quién en esta historia que entristece al barrio de Boedo.