Si tienes entre 20 y 35 años seguramente pasaste muchas tardes después del colegio merendando mientras veías “La Familia Crece” en La 2. Y es que, es así como llegó a España una de las series de anime más populares de la historia y que introdujeron a toda una generación en el mundo del manga japonés.
En esa época muy pocos sabíamos que esos dibujos japoneses que se estaban poniendo tan de moda tenían un nombre propio y que en su país de origen formaban parte de una de los sectores más ricos del mundo editorial.
Wataru Yoshizumi es una autora manga que nació en 1963 y que con menos de 20 años ya empezó a publicar sus primeras obras en revistas especializadas. En 1992 encontró el éxito con “Marmalade Boy”, una serie de shojo publicada por Shueisha en 8 volúmenes y que la encumbró al Olimpo de las artistas mejor pagas y con mejor reputación del mundo.
Posteriormente se creó una serie de anime con 79 episodios y que consiguió muchísimo éxito tanto en Japón como a nivel internacional. De hecho, su impacto fue tan grande que hace poco se hizo una reedición del manga en una nueva colección de 6 tomos con páginas a color, se revisaron todos los errores de traducción de la edición original y se ha ampliado el tamaño de cada tomo.
Actualmente se está rodando una adaptación de “Marmalade Boy” con personas en la vida real, un tipo de remake que está teniendo mucho éxito tras películas como “El libro de la Selva”, “La Bella y la Bestia” o “Maléfica”, que han sido grandes éxitos de taquilla y han llevado a muchos estudios a intentar probar la misma suerte.
Wataru Yoshizumi consiguió allanar el camino para los autores manga que vinieron después y popularizó este tipo de cómics en España, un país que hasta entonces sólo leía producciones nacionales o americanas.
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