La policía alemana había puesto en funcionamiento, en el año 1962, un aparato para controlar la velocidad de los automóviles que circulaban cerca del patrullero. Era una manera de chequear la velocidad real de cada vehículo.
Se aprecia claramente que el automóvil que lleva, en su techo, el medidor de velocidad es un Borgward Isabella, similar a los que conocimos en Argentina. La fotografía la tomé de la revista Parabrisas número 24 de noviembre de 1962.
Mauricio UldaneEditor de Archivo de autos
Archivo de autos tiene Internet propia financiada por sus seguidores y por publicidad en este blog.