Mermelada de Ciruelas verdes: una delicia en mi desayuno

¿Podeis creer que nunca, hasta ahora,  he tenido ninguna inquietud por hacer mermeladas, conservas, etc?.

Siempre me ha parecido comodísimo acercarme al supermercado, extender la mano y coger el bote de mi preferida – la de fresa- y pasar por caja.

Llevo años viendo florecer al ciruelo que tenemos en el jardín, luego poco a poco ir saliendo las ciruelas…montones de ciruelas…”cienes” y “cienes” de ciruelas…porque hay que ver la cantidad de fruta que puede llegar a dar un árbol, para finalmente decirle al jardinero que se las lleve y las reparta como pueda. Saca más de cuatro sacos  de ciruelas cada año.

Pues bien,este año he rondado mucho alrededor de ese ciruelo.

En ocasiones mirándolo de frente, a veces como de medio lado, y en otras pasando de largo para luego girarme sobre mí misma y finalmente mirarle con interés.

HASTA que un dia lo vi claro. Era una pena desperdiciar o enviar a un destino incierto tanta fruta, asi que me puse en contacto con un comedor social y para allá me encaminé cargada de ciruelas…NO SIN ANTES…repartir al circulo mas próximo porque iban madurando lento pero seguro. …Y claro, reservarnos para nosotros una buena remesa que me permitió:

• hacer varias tartas de ciruelas,
• tomar ciruelas frescas de postre…
• hasta que mi familia comenzó a decirme “EN OCASIONES VEO CIRUELAS”...por lo que pensé darles un destino diferente.

Yo siempre compraba las mermeladas

…Pero aquí me teneis, yendo contra mi principio mas sagrado: comprar las mermeladas, me puse manos a la obra y …resulta que es facilísimo. Parece que una carrera universitaria y varios master me han servido finalmente de algo porque me he enfrentado al proceso con éxito total.

Esta mermelada de ciruelas verdes es deliciosa y forma ya parte de nuestros desayunos  y de los desayunos de muchos amigos, familiares y conocidos, porque no sabeis la de botes que me salieron.

Después de repartir, en la nevera debo tener como diez… Tiene un sabor dulce, con un final amargo que la hace deliciosa. ¡Ah! que no se me olvide, parte la hice con azúcar normal y parte con fructosa y os pongo ambas recetas.

Ya que las vamos a regalar, les hacemos un look arreglado pero informal

¡Yo es que cuando me pongo a algo me pongo bien!...y claro, había que hacerles un packaging ad-hoc al que han colaborado Ikea, el chino de la zona y la tienda CASA.

Con unas servilletas de Ikea recortadas he hecho las “caperuzas” de rayas.

En el chino compré los botes y la cuerda para el lacito así tan cursilón que me ha quedado

En la tienda CASA compré las etiquetas.  

Y ya está, lista para regalar. ¡Vamos que parece comprada en Fortnum & Mason, en  pleno Picadilly Street (modestia aparte).

Os dejo aquí las dos recetas por si quereis luciros regalando algún botecito.

Receta

Si la vas a hacer con azúcar: la mitad del peso de la fruta en azúcar

Si la vas a hacer con fructosa: un poco menos de la mitad del peso de la fruta ( para 1kg de ciruelas serían 400 grs de fructosa)

Zumo de medio limón (por cada kg de fruta)

1/2 manzana Golden (opcional. Me lo han recomendado pero yo no la he puesto. Esta manzana espesaría la mermelada por la alta cantidad de pectina – espesante natural de venta en farmacias y herbolarios, para las mermeladas-).

Las ciruelas deben estar un poco verdes, aún sin llegar a madurar del todo. Lávalas bien, pártelas por la mitad y retírales el hueso. Añádeles el azúcar y el zumo de limón y ponlas a macerar en una cazuela durante 1 hora.

Transcurrido este tiempo ponla a fuego medio para que se cueza, durante unos 40 minutos. Retírala del fuego y ya tienes lista la mermelada. Si la quieres con una textura mas fina pásala por la batidora (yo lo he hecho).

Vierte la mermelada en los tarros previamente esterilizados (mas abajo te indico cómo hacerlo) y cierra bien la tapa para hervirlos y hacer el vacio. 

Esterilizar los tarros para la mermelada

Este paso es muy importante ya que asegura una higiene completa en el envasado que garantizará que no habrá bacterias que afecten a la mermelada.

Es muy, muy sencillo, ya que consiste en hervír en agua durante unos 15 minutos todos los botes y tapas que vayas a utilizar. 

Una vez hervidos puedes envasarla, cerrando bien todos los botes

Cómo hacer el vacio en los botes para asegurar tu conserva

Tan sencillo como poner en una cacerola agua a hervir y en el fondo poner un trapo limpio para evitar que los botes se golpeen unos con otros. Pon los botes de pie y agua suficiente para cubrirlos hasta arriba. Déjalos hervir durante 30 minutos. 

Al finalizar sácalos y déjalos enfriar. Etiquétalos con la fecha de envasado.

Y ya está todo dispuesto para disfrutar de una deliciosa mermelada de ciruelas verdes absolutamente casera. ¡Que gusto haber dado este paso pequeño para la humanidad, pero gigante para Kuki Square!.