
Mi parte favorita es la de dejar de vender refrescos y solo permitir agua sola, de sabor, jugo natural y leche light, aunque de igual forma, es solamente un paso de muchos a dar. Que tal Salvador Torres, directivo de la cooperativa Pascual (los que hacen el Boing), diciendo:
"Los niños quieren el dulce. Los mismos niños dicen "Esto no me gusta, no es Boing", no van a dejar de pedirlo".
Para la basura su comentario. En fin, un paso de muchos a dar, no vayan a caer en falsas ideas de que esto es la solución.