Revista Cultura y Ocio

(Mi) Declaración de Derechos Humanos

Publicado el 09 diciembre 2013 por Regina

 

piranesi
En estos días en los medios de difusión se habla mucho de “los Derechos Humanos que defendemos”. El tema ha pasado de ser tabú, hacia una asunción parcial de los postulados relativos a salud, educación y seguridad social. Muy pocos cubanos conocen la Declaración Universal; a pesar de que por cualquier cosa se edita un tabloide de esos que cuestan un peso, nunca se han atrevido a publicarla, los estudiantes universitarios no saben de qué se trata, el cuerpo íntegro pareciera una enfermedad venérea que nadie se atreve a mencionar.

 

Por primera vez soy consciente de que honrar la fecha en que se promulgó la Declaración Universal de Derechos Humanos puede ser riesgoso. La visita de “los compañeros” y “los factores” la semana pasada abre un paréntesis de amenazas que puede ir desde infundir temor hasta la acción física. No sé qué pasará mañana y desearía que no pase nada, pero cualquier medida contra personas pacíficas que desean un país próspero y diverso, confirmaría la necesidad de desenmascarar una vez más a un gobierno que se dice campeón de los Derechos Humanos “que defiende” mientras ignora los que irrespeta.

 

Cuba sigue en el imaginario de muchos en el mundo, como una alternativa donde altruistas ciudadanos construyen el proyecto social del futuro. Los cubanos por reacción a construir durante tantos años un proyecto piranesiano, somos recelosos, y se ha sacado lo peor de nosotros atizando a ricos vs pobres, homosexuales vs heterosexuales, religiosos vs ateos, exilio vs nación.

 

Parecieran diferencias superadas, pero desde el gobierno se sigue instigando al “buen ciudadano” contra el disidente, y mientras la disidencia y los diferentes conceptos de libertad sean criminalizados, quedará tarea pendiente.

 

El gobierno puede, porque tiene los medios, prohibir reuniones y hasta encarcelar activistas. Pero seguirán apareciendo caras nuevas, porque existen condiciones objetivas, porque existe en la sociedad adormilada una voluntad secreta de cambio. Un repaso rápido a los que se anotan en la lotería de visas, a los que han abandonado y siguen abandonando el territorio nacional en cualquier dirección –incluyendo a los que han dejado la vida en el intento–, a las mujeres que difieren la edad de parir y a las parejas que apenas conciben un hijo; a los que votan en blanco, anulan la boleta o no votan, a los que roban cotidianamente al Estado por acción u omisión. Personas sin confianza en las sucesivas promesas de que ahora sí. Es una enorme cifra subjetiva. Subjetiva, pero pesada como un plebiscito.

 

La Seguridad del Estado posee toda la información acerca de la situación interna, cómo se analice y cuáles pautas sigan, está por ver. Mañana tendremos un adelanto.

 


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revista