Si notas que tu perro tiene una inquietante preferencia por comer piedras, no esperes que abandone ese comportamiento por sí solo. Aunque en algunos casos este extraño hábito puede ser algo pasajero, por desgracia no todos los cachorros dejan de hacerlo por su propia cuenta.
A continuación te contamos en qué consiste este comportamiento y las posibles razones por las que tu perro come piedras.
Una enfermedad llamada “pica”
Los perros comen un montón de cosas cuestionables que, desde nuestro punto de vista, no tienen sentido, tales como sus propias heces o las de otro animal. Aunque desagradable de contemplar, es un comportamiento relativamente normal, especialmente en los perros pequeños.
Pero los perros a veces tratan de comer materia inorgánica que no es ni comestible, ni digestiva ni nutritiva en absoluto. Las piedras son un ejemplo de uno de los objetos no alimenticios más comunes que los perros mastican. Este comportamiento se denomina “pica”, y describe la inclinación (y la ingestión) por comer objetos no alimenticios, como rocas, calcetines, zapatos, bolsas de papel, libros o cualquier otra cosa.
La pica no es ni mucho menos exclusiva de los perros. De hecho, algunas personas y gatos también muestran este trastorno de la conducta alimentaria.
Masticar piedras puede ser más peligroso que el simple daño de los dientes o encías de tu perro. Puede conducir a una obstrucción intestinal, vómitos, diarrea e incluso asfixia si la roca es lo suficientemente grande como para bloquear la garganta de tu perro.
Etapa de cachorro
Si tu perro es todavía un cachorro joven y activo, la pica puede ser una moda pasajera. Cuando un perro se encuentra en la etapa de cachorro, todo en su mundo gira en torno al asombro, la curiosidad y la exploración. Si tu perro mastica las piedras en el parque o incluso se las traga, puede ser un signo de simple curiosidad, nada más – y nada menos. Sin embargo, la mayoría de los perros pequeños abandona ese comportamiento cuando alcanzan el medio año de vida.
La dentición (salida de los primeros dientes) también puede ser un desencadenante de este comportamiento. Si tu perro come piedras, puede ser porque encuentra consuelo a su dolor de encías durante esta etapa. Aunque la ingestión de rocas durante la dentición no es la norma, es algo que puede ocurrir.
Necesidad de Atención
Un cachorro también puede comenzar a comer piedras debido a su anhelo de atención y reconocimiento. Si tu cachorro está solo y se siente abandonado e ignorado, puede iniciar la masticación e ingestión de objetos inapropiados como una manera de conseguir simplemente que le observes. Si te lanzas a él con preocupación y le dices con firmeza “¡no!” mientras le miras directamente a los ojos, su pica sólo quedará en un simple reclamo de auxilio – y compañía.
Causas médicas
El hábito de comer piedras de tu perro también puede estar relacionado con ciertas dolencias médicas, algunas potencialmente más graves que otras. Este comportamiento compulsivo puede ser síntoma de una variedad de enfermedades, incluyendo la anemia, deficiencias en la dieta, parásitos intestinales, tumores de estómago, la diabetes y la tiroides hiperactiva. Debido al peligro de ignorar un problema de salud posiblemente urgente, es muy importante que lleves a tu perro al veterinario para comprobar qué es lo que pasa. No pierdas el tiempo para hacerlo, ya que, aparte de la posibilidad de que la pica esté relacionada con una enfermedad, también puede ser muy peligrosa y desencadenar una obstrucción intestinal, especialmente si las piedras han entrado atravesadas en el aparato digestivo. Nunca ignores los síntomas de la pica en tu mascota, incluso si sospechas que sabes la causa de esos síntomas.
Aburrimiento
A un cachorro travieso y juguetón también le puede dar por comer piedras simplemente por aburrimiento. Si tu perro está aburrido, entonces te toca a ti cambiar esa realidad tan desagradable para él. Si juegas con él más a menudo, le llevas sacas a pasear al parque con regularidad o le compras algunos juguetes nuevos excitantes e interactivos para él, mantendrás la mente de tu perro ocupada, a la vez que se ejercita.
La frustración y el estrés
La frustración y el estrés también pueden alentar a un cachorro a actuar de esta forma compulsiva. Si tienes a tu perro encerrado en una pequeña jaula durante todo el día mientras estás en el trabajo, él puede aliviar su frustración acumulada comiendo piedras cuando se sienta libre en tu jardín o en el parque.
Si tu perro tiene una fuente de estrés importante en su vida, también puede recurrir a la pica. Tal vez otro perro más grande de la casa le está acosando, y él se encuentra un poco perdido sobre lo que debe o no debe hacer. La ansiedad es una fuente importante de conductas compulsivas y extrañas en los animales.