“No fuerces el ritmo de la vida. Deja que las cosas vayan y vengan a ti. Y así comprobarás cómo las que deban permanecer, permanecerán. Y las que no desaparecerán. La vida siempre tiene un plan.”
Esta frase de “Ignacio Novo” escritor que he descubierto recientemente me da pié a comenzar este post que me retrae a acontecimientos no muy lejanos en mi reciente Camino de Vida.♥
Se acerca el día, que hace un año lo cambió todo; como dice la frase, todo pasa… Mil cosas han sucediendo estos últimos 365 días desde aquel final de agosto del 2015, pero cierto es, que la bofetada, lejos de hundirme, sirvió de acicate para retomar las riendas de mi vida y reinsertarme a una sociedad que no perdona una.
Aparentemente todo sigue igual, pero todo a cambiado, la vida es una elección permanente que me exige atención plena, para seguir disfrutando de mi existencia. Así que las circunstancias me han obligado a un cambio que han traído tras de sí una catarata de cambios.
Ahora, gracias al/los obstáculos que he pasado me he descubierto a mí mismo, y sé de que fuerzas dispongo para seguir mi camino, pues entonces, sólo me queda luchar contra el hecho y reconocerlo.
Sigo atento a mis errores, para continuar creciendo, la única amenaza es la inercia de mis miedos.
No me pliego a mi ilusión o ante las adversidades que están por llegar, pero miro atrás de vez en cuando para no olvidarme dónde estuve y lo que viví.
Resuenan a veces los silencios y los ruidos de aquella habitación oscura, los olores, sus dimensiones su oscuridad, ahora sé lo que significa de verdad no tener libertad.
De mi pasado sólo me quedan recuerdos y son ellos los que me pueden esclavizar o liberar, si lo atiborro de odio y resentimiento me esclavizarán de por vida, yo elijo liberarme, soltar lastre, quiero convertirme en un hombre reconciliado y conciliador, por ende feliz.
Me voy haciendo mayor y a veces entierro sin quererlo mis sueños bajo capas de necesidades, urgencias y obligaciones que yo mismo me impongo sin quererlo, fruto de la pestilencia a la que nos dejamos someter.
Si me aferro, me niego a lo nuevo y hay tanto que descubrir y vivir…
Tu vida la haces tú cada día
Tengo un plan que eliminará el tedio, el abatimiento, la soledad no buscada, mi idea, mi proyecto se llama ACCIÓN y promete un cambio en Mi Camino de Vida.
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