- No esperaba que me hiciera tanto daño…
De ser una película norteamericana con grandes estrellas de raza blanca como protagonistas, estaríamos hablando de la Casablanca del siglo XXI, puro mito instantáneo del séptimo arte. Pero así, ya es suficientemente magnética, magnífica, especial, seductora, emotiva, por sí sola.