Si saliera a la calle, me pusiera una peluca roja, y le preguntara a la gente si cree que las niñas cada vez tienen antes su primera menstruación, la mayor parte de la gente me diría:
Pero la cosa es que sí, la pubertad se está adelantando, y con ella la edad de la primera regla.
La primera en darse cuenta de esto fue la pediatra Marcia Herman-Giddens. A Marcia le pareció que las niñas que acudían a su consulta se desarrollaban antes, algunas presentaban crecimiento mamario y vello púbico con tan solo 5 años. En 1997, publicó un estudio en el que concluyó que la edad media del primer periodo se situaba entorno a los 16 años en 1860, a los 14 en 1920, y a los 12 y medio en 1997.
Los hallazgos de Marcia han sido confirmados en diferentes investigaciones, con una puntualización: la edad de la primera regla se está adelantando, pero no lo hace tan deprisa como el desarrollo mamario y la aparición de vello púbico. Parece entonces que la pubertad empieza antes, y dura más. Y la pubertad también se está adelantado en los niños. Esto también les toca.
Más tiempo para disfrutar de la pubertad, ESA etapa.
Pero, ¿a qué se deben estos cambios? La pubertad es un proceso complejo, y probablemente su adelanto se deba a diferentes cambios, entre ellos se habla de la obesidad y la exposición a ciertas sustancias químicas.
Se sabe desde hace tiempo que es necesario un peso mínimo para que una mujer tenga la regla. Algunas bailarinas, gimnastas, mujeres que han sufrido hambrunas, o enfermedades como la anorexia dejan de tener la regla porque su cuerpo carece de los recursos necesarios para reproducirse. De una manera similar, parece que el aumento de peso (en concreto, el aumento de grasa) también afecta a la aparición de la menstruación: cuanto más tejido graso acumule una niña, más temprano llegará a la pubertad.
Se piensa que una de las claves de este proceso es la leptina, una hormona producida por las células de grasa que se encarga de reducir la sensación de apetito. Las personas obesas suelen ser resistentes a la acción de esta hormona, y producen más cantidad de la misma como compensación. Los valores de leptina también aumentan justo antes de que comience la pubertad. Si existen unos niveles basales de leptina más altos, la pubertad podría comenzar antes.
También se ha propuesto que la exposición a productos químicos que imitan el efecto de ciertas hormonas puede favorecer la pubertad prematura. Productos químicos con este tipo de estructura pueden encontrarse en plásticos, pesticidas, aceites esenciales… Al estar presentes en tantos lugares, es complicado rastrear estos productos, podemos decir que las investigaciones aún están en pañales. Estudios con animales han probado que algunos de estos productos pueden afectar la función y estructura de los órganos reproductores. Pero no se sabe si esto ocurriría en humanos, ni a qué dosis o tiempo de exposición, ni de qué manera.
Parece claro que la pubertad se está adelantando, aunque no sabemos muy bien porqué. Pero, ¿qué importancia tiene esto? ¿Deberíamos preocuparnos?
A nadie nos sorprenderá leer que la pubertad está asociada a depresión, ansiedad, problemas con la imagen corporal, trastornos de la alimentación… Pues bien, imagina si todo esto te llega aún más joven. No parece el combo ideal.
Pero además hay efectos a largo plazo. Varios estudios han relacionado la menstruación precoz con un mayor riesgo de cáncer de mama y problemas cardiovasculares. Aunque no todo son malas noticias, hay expertos que opinan que sabemos muy poco sobre las potenciales ventajas de la pubertad precoz, simplemente porque no se han estudiado.
Así que si alguna vez se os acerca alguien con una peluca roja, y os pregunta en mitad de la calle si sabéis si la edad de la primera regla se está adelantando, ya sabéis qué responderle “Sí, pero no tanto como el comienzo de la pubertad.”
Archivado en: BIOLOGÍA, GÉNERO, La Regla, SALUD Tagged: dosis, efecto, exposición, hormonas, leptina, menarquia, MENSTRUACIÓN, mito, niñas, niños, obesidad, periodo, peso, pubertad, regla, sobrepeso, verdad