Bueno, pues ya estamos en el 2013... Confieso que me genera simpatía este año, más que nada porque el número 13 me encanta!!! Este año no ha habido propósitos de año nuevo, más que nada porque ya me he dado cuenta de que nunca los cumplo. Vamos, que el día 2 ya se me han olvidado...
Sin embargo, le empiezo con unas ganas tremendas de hacer pan...(y bollería fermentada, claro). ¡Qué tendrá el pan???
Una vez pierdes el miedo a eso de las fermentaciones....es coser y cantar. Quizás una de las elaboraciones más relajantes, de verdad. Y, desde luego, muy agradecidas...El olor, el sabor de un pan casero (o un bollo)...No tiene parangón...
Las recetas que suelo poneros son muy sencillas, con la única "complicación" de controlar los tiempos de fermentación. En este caso sólo hay una fermentación y el amasado es muy sencillito. Comenzaremos por una "esponja", a la que luego iremos incorporando el resto de ingredientes.
En cuanto a la fermentación, ¿cómo podemos saber que nuestra masa ha fermentado ya y está lista para pasar a la siguente "fase"? Bueno, primero, con la vista, notaréis que está "hinchada", ha crecido. Y, por otro lado, si la presionáis suavemente con la yema del dedo, veréis que está suave y "mullida". La masa recobrará su ser tras presionarla. Vamos, como un colchón "viscoelástico", jaja!! Es mejor verlo, pero espero haberme explicado bien y que os hagáis una idea.
Esta vez os propongo estas Mounas, un bollo típico de Argelia. Muy suaves y deliciosas para tomar, tanto solas, como con leche. Son muy similares a las medias noches de aquí, y no resultan demasiado dulces, por lo que se pueden rellenar con jamón york, queso fresco, queso crema.... A mí me gustan abiertas por la mitad y con un poco de mantequilla, a modo de sandwich.. Increíbles!!!
Por cierto, ante cualquier duda, me podéis encontrar por twitter, facebook o en mi mail ;)
Ingredientes:
450 gr de harina de fuerza de El Amasadero
1 cucharadita de sal (unos 5 gr)
100 gr de azúcar
15 gr de levadura prensada
125 ml de leche tibia
2 huevos medianos
cáscara de naranja
3 cucharadas de aceite de oliva Carbonell 0'4º
2 cucharadas de agua de azahar
huevo batido para pintar (yema)
Elaboración:
1.- Disolvemos la levadura en la leche tibia
2.- La ponemos en un bol
3.- Tamizamos la harina
4.- Y añadimos un poco de harina tamizada a la leche con la levadura. Lo justo para obtener una crema densa.
5.- Mezclamos con ayuda de una cuerna (o espátula) de panadero
6.- Tapamos con un paño y dejamos reposar en lugar templado unos 20 minutos, hasta que la masa esté hinchada y esponjosa. Esto es lo que se denomina esponja, que añadiremos a la masa para ayudar a la fermentación de las mounas.
7.- Una vez la "esponja" se haya hinchado y tenga burbujitas estará lista.
8.- Ponemos la esponja en el bol de la amasadora o continuamos en el mismo bol. Añadimos los huevos ligeramente batidos
9.- Y mezclamos ligeramente.
10.- Incorporamos la cáscara de naranja
11.- El aceite
12.- Y el aroma de azahar o agua de azahar.
13.- La sal
14.- Y el azúcar, mezclamos ligeramente
15.- E incorporamos el resto de la harina tamizada poco a poco, mezclando a la par.
16.- Comenzamos a amasar. Si lo hacéis en amasadora, a velocidad baja (2) al principio. Si, por el contrario, seguís a mano, con la cuerna, poco a poco, en el bol, es la forma más fácil de hacerlo. Una vez coja consistencia, volcáis la masa a una superficie de trabajo ligeramente enharinada y comenzáis a amasar manualmente.
17.- Amasaremos hasta obtener una masa blanda y ligeramente pegajosa. Si queda demasiado pegajosa, añadiremos un poco de harina (una cucharada cada vez). Si, por el contrario, os quedase demasiado dura, id añadiendo un poquito de agua (también a cucharadas).
Si estáis amasando con la amasadora, los últimos minutos subiremos a velocidad 4.
18.- Para comprobar que la masa esté lista, cogeremos una pequeña porción e iremos estirando con suavidad: si queda como una especia de sábana transparente, estará lista.
19.- Volcamos la masa en una superficie ligeramente enharinada (si estábais amasando en robot, claro!).
20.- Dividimos en 12 porciones del mismo peso. Y formamos bolas con cada porción (han de quedar lisitas y prietas: lo mejor es poner la porción debajo de la palma de la mano, apretar y hacerla rodar. Al final ella sóla coge la forma, es muy fácil).
21.- Colocamos las porciones sobre una placa de horno ligeramente engrasada, dejando espacio entre ellas. Tened en cuenta que van a aumentar de volumen, tanto durante la fermentación, como en el horneado.
22.- Introducimos la placa dentro de una bolsa de plástico, la inflamos, cerramos y dejamos levar en lugar cálido hasta que doblen su tamaño. Mientras, precalentaremos el horno a 200ºC.
23.- Una vez hayan doblado el volumen, destaparemos las mounas, y las pintaremos con yema de huevo (tened cuidado de no pinchar la masa).
Introducimos en el horno y horneamos durante 15 minutos hasta que estén firmes y doradas.
Una vez listas, retiramos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla.
Se conservan perfectas dentro de una bolsa de plástico (Yo las puse en una de esas que llevan "zip")