Ni Shi Huang Ti pudo con G10



Maestro.

Giovanni Hernández llegó al gol número 100 al convertir el que sirvió para empatarle el partido a Deportes Quindío quien había construido una muralla defensiva que el Junior no había sido capaz de derribar hasta que don G10, la figura de la cancha, pudo superar dentro del área a sus numerosos marcadores. El resultado fue empate, pero el Junior mereció mucho más. 

Después de unos primeros minutos avasallantes del Junior, el Quindío empezó a encontrar peligrosos contrataques que pudieron terminar en gol, primero Caicedo, imparable con balón dominado, después Murillo y la velocidad por la derecha, hicieron preocupar a la defensa del Junior que finalmente respondió bien junto a Viera. Una clara posibilidad tuvo el Quindío mediante el siguiente disparo de Vargas que dio en el travesaño.

El Junior siempre pensando en cada jugada, tratando de elaborar, llegaba con facilidad hasta 3/4 pero se encontraba con una muralla defensiva muy difícil de derribar. La movilidad y el toque de primera de Giovanni Hernández no fueron suficientes para desequilibrar, y Vladimir Hernández con su habilidad apenas pudo intentar mediante un remate de media distancia. Ruiz tuvo su chance con una difícil media chalaca que terminó yéndose desviada. 

Fue un primer tiempo muy entretenido y limpio, generoso de parte del Junior, y con muy poco el Quindío pudo haberse puesto en ventaja al tener menos llegadas que el Junior pero de mayor peligrosidad.

El disparo de Vargas que dio en el travesaño.

Después de 10 minutos que el Junior usó para desbordar por todos lados al Quindío, con dos llegadas de Giovanni Hernández muy peligrosas que pasaron cerca, más la compañía de Vladimir y de Páez, el Junior tenía todo a favor, pero cuando menos se lo esperaba, en la primera jugada de contra que tuvo Quindío, llegó el gol de Florez.

Y cuánto puede aguantar un equipo defendiendo el gol inmerecido que había obtenido, especialmente cuando surgía Giovanni Hernández manejando los avances del Junior que merecía el segundo gol antes que el primero- No alcanzaba la cantidad de atacantas en el Junior, por lo que el cheche Hernández mandó a la cancha a Sherman Cárdenas, quien en la primera pelota que tocó la tiró al área donde esperaba el gran G10 para hacer malabares y convertir el gol del empate.

Después del empate, mayor fue la superioridad de Junior de Barranquilla con un Giovanni Hernández imparable, pero era demasiado numerosa la defensa del Quindío que terminó sacando un empate inmerecedio pero que servirá de mucho en la tabla final.