Revista Cocina

“No corro ni para coger el tren”

Por Sariqui @CocinadeSariqui
Hoy os traigo una receta muy especial, no se come pero si la sigues al pie de la letra conseguirás una mejor calidad de vida.
Os presento el movimiento "Slow", un cambio cultural que promueve disminuir nuestro ritmo de vida para disfrutar más de nuestro tiempo.
“No corro ni para coger el tren”
Se basa en retomar las sanas costumbres del pasado, en realizar actividades placenteras y en comer saludablemente. No es más que en un cambio de actitud ante la vida, relacionado con la desaceleración de la forma de comer y de trabajar, y dedicar un mayor espacio para el ocio, el relax, los hobbies y las relaciones personales.
No se trata de tener una actitud pasiva, sino una redistribuir nuestra energía vital de forma correcta con el fin de tener una mejor calidad de vida.
Aplicado a la gastronomía, tenemos lo que se llama ‘slow food’, que no es otra cosa que cocinar de forma tradicional, disfrutando del proceso, pausadamente, sin estrés. Cocinar se puede convertir en nuestro momento de relajación del día, en una forma de eliminar tensiones acumuladas, para mi sin duda lo es.
Esta filosofía de vida ha llevado a la creación de restaurantes de ‘slow food’, pueblos enteros donde pasar unas vacaciones 'slow'… pero sobre todo donde vale la pena ponerlo en práctica es en nuestro día a día, en cada pequeña cosa que hagamos.
Ahí va una receta personal para conseguir una vida slow. ¿Te atreves a probarla?
Slow Life = Slow Food
Ingredientes para 1 persona:
3 kg de Energía1 kg de Buen humor2 kg de Relax4 kg de Amor1 kg de Compañerismo
Añade todos los ingredientes en un bol, mezcla bien y sigue atentamente el paso a paso:
  • No corras para coger el tren/metro/bus, vendrá otro en apenas unos minutos.
  • Evita comprar precocinados, cocinar se puede convertir en una actividad gratificante, ya sea solo o acompañado.
  • Siempre que puedas, elige ir caminando a los sitios, a la vez que haces deporte ventilas tu mente.
  • Ten una actitud positiva ante la vida, aparta los malos pensamientos y lo bueno vendrá solo.
  • Ayuda a los que te rodean en la medida que te sea posible, cuando tu los necesites, también lo harán.
  • Juega, baila, ríe, llora si hace falta.
Haz todo aquello positivo que te haga sentir bien y te sentirás mejor.
Bon profit!

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