No creas en ti

Por Bernardo Villar Pasquel

No creas en tu pasado. Deja de pensar en lo que has vivido y de quejarte por lo injusta que ha sido la vida contigo (¡¿Cómo se atreve la vida a ser distinta de cómo te hubiera gustado a ti que fuera?!).

Yo sé que tu pasado es lo más confiable con lo que cuentas en la vida. Es lo único que conoces realmente, o al menos conoces la historia que te cuentas sobre tu pasado. Parece que el pasado tiene todas las respuestas, en el pasado aprendiste todo lo necesario para sobrevivir hasta este día, así que si alguna situación se repite o alguna se parece a algo que ya viviste, tienes las herramientas para salir adelante, ¿verdad?

El pasado.... ¿Cómo no creer en él? Gracias al pasado hoy estás aquí. Puede ser que te guste donde estás, puede ser que no te guste nada, pero al final estás aquí.

Ya sabes: no tomes más riesgos que los estrictamente necesarios, no apuntes muy alto, no te comprometas, no des hasta que te den, no ames a menos que estés bien seguro que te aman, y aún así, no ames totalmente. Puede dolerte.

No te pongas metas y no tendrás que cumplir nada, confórmate con la vida que te tocó.

Sin embargo, no creas en tu pasado. Además de lo mismo, no tiene nada nuevo que ofrecerte.

No creas en ti. No es necesario. De nada sirve que creas que puedes hacer cosas extraordinarias. Tampoco sirve saberlo. Tan solo saber algo nunca ha cambiado nada.

Cree en una sola cosa: en tu futuro.

Siempre y cuando sea lo suficiente grande.

Grande como para cambiar tu presente.

Grande como para cambiar quién eres.

Grande como para cambiar lo que haces

Grande como para cambiar tu historia sobre lo que es posible.

Cree en el más grande futuro que puedas imaginar.

Si creas un futuro grande, grande, realmente grande, no importa si no crees en ti.

Ese futuro se encargará del resto