Nuevo procedimiento de síntesis enzimática para la producción de fructooligosacáridos

El CSIC  ha desarrollado un nuevo procedimiento para la síntesis enzimática de fructooligosacáridos conocidos como FOS. Para los que no los conozcáis los FOS son compuestos azucarados que tienen capacidades prebióticas y beneficiosas para la salud, convirtiéndolos en ingredientes de muchos alimentos como son productos de panadería, pastelería, galletas, formulas infantiles y un largo etc.
Estos fructooligosacáridos tienen distintos efectos según sea el enlace que se forma entre los tres azúcares. En este caso el tipo de FOS se llama 6-kestosa porque el enlace es de tipo 2-6. Los FOS se pueden obtener mediante la hidrólisis de cadenas largas de inulina, o bien mediante la reacción de síntesis a partir de sacarosa. En este caso, el método utilizado es el de síntesis a partir de sacarosa usando la invertasa de la levadura panadera, S.cerevisiae.
La novedad que aporta este nuevo procedimiento desarrollado en el laboratorio de Julio Polaina del Instituto de Agroquímica y Tecnología de los Alimentos es que todo ocurre en un mismo recipiente y en un proceso continuo, es lo que hemos llamado “one-pot process”. El método utilizado emplea una enzima modificada mediante técnicas de de biología molecular que es producida y secretada, de forma controlada y en elevada cantidad, por un cultivo de levadura de panadería, sin tener que extraer ni purificar el enzima. En los costes de fabricación de productos en los que se utilizan enzimas su purificación es uno de los pasos más costosos es por ello que esta nueva técnica da lugar a un proceso que facilita muchísimo su escalado industrial reduciendo los costes.
Como ventajas, además de ser un proceso seguro, inocuo y medioambientalmente limpio, consigue la obtención de FOS a un precio muy inferior al de su actual valor de mercado utilizando bio-herramientas calificadas como de grado alimentario.
Actualmente la patente está en trámite y cualquier empresa interesada puede ponerse en contacto con el CSIC para licenciarla. Sin duda un paso más en la industria agroalimentaria y además made in Spain.