Obama y su hipocresía...

El 31 de abril el mundo miraba con asombro y atónito como un comando de Israel asaltaba un barco en aguas internacionales que viajaban rumbo a Gaza atestado de ayuda humanitaria para el 1.500.000 palestinos que se hacinan en la Franja. El revuelo que ha ocasionado este acto de piratería ha enfrentado a los que defienden la actuación de Israel como “defensa propia” y los que le acusan de “asesinar a 9 activistas y de actos de piratería”. Casi una semana después, el líder del mundo libre. El flamante Nobel de la Paz. El adalid de la Libertad se ha pronunciado para decir, nada… Eso es lo que ha dicho Barack Obama.

Según el presidente de Estados Unidos “el asalto a la flotilla no beneficia a la seguridad de Israel a largo plazo”. Además de añadir que “hubo pérdidas innecesarias de vida” pero no se atreve a condenar directamente a Israel sino que emplaza a “tener todos los datos sobre la mesa para saber cuáles han sido los hechos”. De labios del presidente norteamericano ningún reproche. Ninguna condena. Simplemente asiente ante los muertos que siguen amontonándose a los pies de Israel… Sin embargo si corre a la hora de condenar el ataque de Corea del Norte o el programa nuclear iraní… La doble moral de Obama no conoce límites.

"EE UU ha dicho, junto al resto de los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU, que condenamos todos los actos que llevaron a esta violencia. Fue una situación trágica. Es necesario lograr una paz duradera en Oriente Medio". "No es prematuro decirle a los israelíes y a los palestinos, y a todas las partes en la región, que la situación actual es insostenible. Hemos intentado resolver esto pedacito por pedacito y no funciona”, ha subrayado el presidente de Estados Unidos en una entrevista concedida al progama de Larry King que se emite en la CNN.

El presidente estadounidense ha recordado que su país apoya una investigación "de estándares internacionales" sobre lo sucedido y está seguro de que Israel estará dispuesto a someterse a ella. A lo que Israel ha respondido con una sonora carcajada… Benjamín Netanyahu, primer ministro hebreo, ha reiterado que rechaza cualquier tipo de investigación sobre el asalto a los barcos de la flotilla. El primer ministro israelí sostiene que Israel es un país soberano no tiene por qué someter a investigación acciones que considera legales y legítimas, como la interceptación de la Flotilla de la Liberta.

Al final lo de siempre… Los únicos que han perdido han sido los muertos.