Hace mucho tiempo, en lo que pareciera una galaxia muy muy lejana, la humanidad se preocupaba por su salud. La alimentación era vista como algo básico para estar bien. Tenemos, por ejemplo, a Hipócrates diciendo, "Que los alimentos sean tu medicina, y tu medicina sean los alimentos".
Con riesgo a sonar muy hippie (como diría mi hermano), pasamos de vivir en armonía con el planeta y con nosotros mismos, a vivir una vida de laboratorio. Hagan un conteo rápido de lo que comieron ayer, ¿qué porcentaje estaba empacado y ya preparado? Todo esto ha ido afectando nuestra salud poco a poco, hasta que estos últimos 20 años se ha desatado un problema real.
Ahora le llamamos "estilo de vida saludable" a lo que antes era una norma, y no me tengo que ir tan atrás como con los griegos. Nuestra idea de salud hoy en día es controlar las enfermedades, tomar medicinas e ir al doctor. Le hemos dejado nuestra salud a otras personas, ya no depende de nosotros. Hay tantas personas que no saben lo que se están comiendo, que no saben que tienen sobrepeso, o que ni siquiera les interesa cambiar su estilo de vida.
Afortunadamente, con los años he visto que esto se abre más y más. Puedo decir que veo una luz al final del camino... por largo que sea el camino. Tal vez tuvimos que tocar fondo para empezar a darnos cuenta. Hay que recuperar lo que hemos perdido, entre pidamos mejores cosas, nos darán mejores cosas. Como les digo siempre, la industria se maneja con dinero, si ellos ven que lo que se compra es calidad, entonces nos van a ofrecer eso más y más.
Volvamos al básico de "prevención es salud", porque la salud no es la ausencia de enfermedad. A comer bien, a hacer ejercicio, a disfrutar las comodidades de hoy en día pero teniendo claros los principios básicos.