«Soy tan cinéfilo como es posible serlo. Adoro el cine. Pero no necesito ver tres películas por día. Me basta con ver tres buenos filmes al año. En un año que sea de buena cosecha para el cine, se producen cinco o seis buenos filmes en el mundo. No más. Se ha convertido en el mayor problema de los festivales: su número creció hasta alcanzar, no sé, la cifra de 2800. Puede estar bien ver cinco o seis películas. A veces también puede estar bien contentarse con lo peor que haya. Precisamente para aprender lo que no hay que hacer. Los malos filmes son siempre más instructivos que los buenos».
(Werner Herzog)